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—Shulan, de todos los niños que he ayudado a nacer, tu pequeño nieto es el más guapo y se parece justo a Ahao.
—¡En efecto, se parece tanto a Ahao!
—Yingzi, ¿podrías sacar algo de leche para mi nuera? —preguntó.
—Quédate tranquila, acabo de verificar y hay suficiente para tu nieto —respondió tranquilamente.
Tras finalizar todos estos quehaceres, era hora de terminar la jornada laboral.
El padre de Yun estaba en la cocina preparando gachas de mijo para su nuera.
Mientras tanto, la madre de Yun, viendo que su hijo aún no había regresado y al enterarse del nacimiento, corrió con treinta huevos de gallina.
—¿Por qué has venido? —La madre de Yun salió, solo para ver a su hija embarazada.
—Escuché que tu nuera dio a luz, así que vine. Madre, ¿qué tuvo? —preguntó ansiosa.
La pequeña Zhang Yunxuan entonces respondió emocionada:
—¡Un hermanito, es adorable!
Consuegra, Zhang Cuihua y Zhao Fang también llegaron con huevos. Después de un rato,
