—Yawen...
Las pertenencias de Ou Liya se estrellaron contra el suelo, esparciendo libros de texto y varios documentos por todas partes.
Una hoja de papel revoloteó hasta los pies de Xie Yawen.
Pálida desesperadamente, Ou Liya se movió para recogerla, pero Xie Yawen fue más rápido.
—Aviso Disciplinario: Ou Liya ha aceptado sobornos de padres durante su periodo docente, violando gravemente la ética profesional, y después de considerarlo, se ha tomado la decisión de terminar su empleo...
En los últimos días, el mayor temor de Ou Liya era que Xie Yawen se enterara de este incidente, tanto que no se atrevía a contactar a Xie Yawen ni a visitar la Familia Xie.
Para su horror, Xie Yawen lo había visto todo. Su pánico extremo hizo que su voz temblara —Yawen, escucha mi explicación...
Una buena educación académica mantuvo a Xie Yawen de perder los estribos. En cambio, le devolvió cortésmente sus pertenencias.
—Si no hubiera venido a verte hoy, ¿nunca habrías planeado decírmelo?