—Siéntanse libres de charlar, prepararé el almuerzo y luego pueden ir a la escuela —dijo Tía Wen le dio una palmada en el hombro a Gu Yansi.
—Entonces, ¿te interesa? —Lu Qingyi se cruzó de brazos, salió de detrás de la caja registradora, su voz sonaba fría como el hielo.
Por supuesto, a lo que se refería Lu Qingyi era la posibilidad que había mencionado la última vez sobre estudiar medicina para Gu Yansi.
—¿Convenciste a mi madre? —Gu Yansi preguntó, mirando a Lu Qingyi de manera profunda.
Su madre siempre se había opuesto a la idea de estudiar medicina o de convertirse en médico, pero hoy, al presentar a Lu Qingyi, había enfatizado la escuela de medicina. Parecía no tener ninguna aversión hacia Lu Qingyi.
—No —Lu Qingyi sacó una silla con el pie y se sentó, cruzando las piernas.
Se mostraba completamente despreocupada.