—¿Qué hizo la segunda tía?
Mo Qingze permaneció en silencio, recordando los eventos que ocurrieron en la casa de su tío después de la muerte de sus padres. Sus recuerdos se extendían desde lejanos hasta recientes, de borrosos a claros, revelando detalles previamente pasados por alto que ahora emergían en su mente con una precisión inconfundible.
En aquel entonces, habiendo apenas aprobado el examen para convertirse en Erudito, se casó apresuradamente con la señora Du de la aldea vecina por insistencia de su segunda tía. El año siguiente, cuando quiso tomar los exámenes imperiales, su segunda tía afirmó que la plata que dejaron sus padres se había gastado toda, dejándolo sin gastos de viaje para ir a la ciudad.