Desde que se mudó al patio delantero de la residencia de la Familia Mo, la Familia Wang había estado discutiendo pedir disculpas a la Familia Mo, para resolver sus viejos rencores y así tener más facilidad al pedir favores en el futuro.
Pero como dice el refrán: «El que toma el dinero de alguien se vuelve de voz suave». Si uno realmente es sincero sobre disculparse, naturalmente traería un regalo para demostrar sinceridad. La Familia Wang sí tenía algunas cosas bonitas, al menos algunos pollos que ellos mismos eran demasiado reacios a consumir, así que ¿cómo podrían llevarse a darlos a la Familia Mo?
Justo cuando estaban a punto de hacer la visita, vieron a la Familia Niu traer Hojas Quemadas Explotadas. La cuñada Wang comenzó a tramar, intentando congraciarse con Mo Yan pisando a la Familia Niu. No solo recibió una bofetada figurativamente, sino que sus manejos se expusieron en el acto, lo cual fue incluso más vergonzoso que una bofetada literal.