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Después de volver a la Residencia Yan, Yan Zhigao fue directamente al Patio Songhe para darle sus respetos a su abuela y luego se quedó a charlar con ella. Durante la conversación, elogió a Yan Wenxiu y a las otras dos por su actuación en el banquete del Festival del Bote del Dragón.
Escuchar los logros de su nieto naturalmente deleitó a la vieja Señora, pero ella parecía algo distraída.
Su hijo había llevado a casa a una joven, y francamente, estaba disgustada, pero también sabía que no era su lugar interferir en los asuntos domésticos de su hijo; de lo contrario, podría volverse desagradable.
No era solo la vieja Señora quien estaba de mal humor; todos los demás en la casa también parecían distraídos.
Aunque todos estaban curiosos sobre los orígenes de Liao, Yan Zhigao no parecía inclinado a decir mucho, solo mencionó que era un regalo de su superior y dio instrucciones a la Señora Li para que hiciera los arreglos.
