—En el libro, Luo Qiao, bajo la intervención de los cuadros de la brigada, fue reconocida por la Familia Zhao —dijo el narrador—. Sin embargo, sus días se volvieron aún más difíciles, con Gao Suhua golpeándola y regañándola frecuentemente a la dueña original, quien ni siquiera lograba comer una comida completa todos los días.
—Entre las hijas de la Familia Zhao, excepto por la cuarta hija, Zhao Xiaohua, quien era algo amable con ella, ninguna la trataba bien —comentó tristemente—. Se convirtió en la que menos comía, la que se despertaba más temprano y la que más trabajaba en la familia.
—Aparte de cocinar, lo cual no era su responsabilidad, se encargaba de todas las demás tareas del hogar y aún así no podía descuidar ganar puntos de trabajo en los campos —explicó—. Aunque Zhao Pulin la trataba bastante bien, nunca la golpeaba ni regañaba, e incluso se levantaba para protegerla cuando su esposa e hijas se excedían.