—¿Q-quién? —balbuceó Sophia, fingiendo no reconocer el nombre.
Elias se quejó de frustración. —Solo porque no diga nada no significa que esté ciego como Papá.
El corazón de Sophia latía desbocado. Su mirada era tan intensa que casi decidió confesarlo todo. Quizás él la odiaría, pero sabía que eventualmente se convertiría en parte de su plan: todo lo que estaba haciendo era por él.
—Así que realmente fuiste a encontrarte con él —concluyó Elias, notando el pánico en el rostro de Sophia.
—Yo-Yo, no es lo que piensas, Eli... —murmuró Sophia, insegura de cómo empezar. ¿Cómo podría explicarle que se había hecho amiga de Gracia Wright, la madre de Evelyn, o por qué se casó con William después de la muerte de Gracia?
—Por la forma en que te escabulles y tienes llamadas secretas con él, estoy seguro de que es más que solo amistad, Mamá —insistió Elias, haciendo que Sophia frunciera el ceño. ¿Pensaba que Maverick era su amante?