Al ver a Lu Jiang lavando los pañales, Gordito se carcajeó encantado, lo único que faltaba era que aplaudiera con sus manitas.
—¡Qué niño tan travieso!
Feng Qingxue se volteó a un lado, asegurándose de que Lu Jiang no viera esto, de lo contrario, podría enfurecerse hasta morir.
—¿Dos a tres veces? —Al oír que su hijo hace popó dos a tres veces al día, y definitivamente orina más seguido que eso, el rostro de Lu Jiang se puso aún más verde. Sacudió el pañal limpio y no pudo evitar alzar la voz—. ¿Estás diciendo que Xibao hará popó al menos una vez más hoy? ¿Tenía que lavar otro pañal manchado de popó?
Feng Qingxue asintió con una sonrisa:
— Es normal. He llevado muchos diarios de crianza. Puedes echarles un vistazo con cuidado.
Para entender la vida diaria de su hijo y sus reacciones en cada etapa.
