Una vez que escuché la confirmación de D, pude sentir cómo el maná estaba siendo inyectado en la niña elfo de forma constante y regulada. Se sintió como si estuviera llenando un pequeño vaso gota a gota. No podía sentir el poder de la flor por ningún lado, pero el hecho de que la niña elfo no estuviera haciendo ninguna mueca de dolor significaba que su poder estaba haciendo efecto. Estaba más que claro que el poder de la flor operaba de formas desconocidas.
El maná que estaba siendo filtrado en la niña elfo era el que se encontraba dentro del cubo negro. Esa energía era más pura que la que se encontraba normalmente en la atmósfera; supuestamente era de calidad superior según el análisis realizado por D, y en teoría debería ser más fácil de utilizar. El proceso que estaba realizando no podía ser visto por las personas que nos rodeaban. Después de todo, estaba utilizando la característica 'ocultar' y también estaba utilizando la característica 'transferencia'. Por lo general, los elfos parecen poder percibir cuando alguien manipula el maná en la atmósfera, pero sabía que no podrían percibir mis movimientos ya que el maná que estaba utilizando no se encontraba en la atmósfera, sino que provenía del cubo. Y si sumamos la característica 'ocultar' a la ecuación, se les hacía imposible poder detectar dicha energía.
La característica 'transferencia' me permitía transferir energía fácilmente. No necesariamente necesitaba tocar el objetivo para poder transferir la energía; bastaba con que pudiera verlo con mis ojos. En este caso, estaba tocando a la niña elfo para que nadie pudiese ver la energía que estaba filtrando en ella. Estaba seguro de que si me alejaba de la niña elfo y tratase de transferir la energía, se darían cuenta de lo que estaba haciendo por el extraño movimiento que produciría mi energía en la atmósfera. Estaba seguro de que al menos Idril se daría cuenta, y lo último que quería era que se les ocurriera la grandiosa idea de intervenir mientras realizaba el proceso. Podía ver los rostros de la familia real; su preocupación era palpable. Estaba claro que todos estaban nerviosos, después de todo podía ver cómo sus corazones palpitaban.
Idril parecía estar escaneando el proceso que estaba realizando, pero para mala suerte de ella, ni siquiera podía ver el proceso que estaba utilizando para filtrar el maná en la niña. Visto desde un punto de vista externo, el chico de cabello blanco y ojos azules no estaba haciendo nada peligroso. Después de todo, ella era incapaz de sentir el maná de aquel chico, por lo tanto, le era imposible determinar si lo que estaba haciendo era peligroso o no. Y también miraba a la flor con rostro humano, ya que se sentía extrañamente atacada por ella. Su sed de sangre había disminuido después de ser amenazada por aquel chico, pero por alguna extraña razón aún se sentía incómoda.
Eryn observaba con una mirada complicada en su rostro la escena que tenía delante de ella. Parecía más preocupada por la extraña flor que por su niña. Tenía un mal presentimiento con respecto a ella; esa flor le transmitía una extraña vibra y hacía que su cuerpo temblara de forma descontrolada.
Maedhros, por su lado, ya le había ordenado al líder de la guardia real que estuviese atento a cada movimiento que hiciese la flor, ya que no estaba convencido del todo de que ella fuese débil como lo había asegurado ese chico.
Angrod, por su lado, estaba pensando en una cosa muy diferente. Él mejor que nadie sabía lo que esa extraña flor era. Ese ser no podía ser categorizado al mismo nivel que una bestia. Después de todo, la flor había hablado, lo que demostraba que era especial. Y para empezar, esa raza no hablaba. Como mucho, podría imitar los sonidos que había escuchado con anterioridad, pero esta no estaba imitando los sonidos. Esta flor tenía inteligencia y podía responder a las preguntas que le hacían. Él había leído múltiples registros y detalles de ese tipo de criaturas en su adolescencia, y ninguna de las criaturas de las que había leído en textos decía que podían hablar. Además, otra cosa bastante peculiar era el color de esta flor; su color era rosado y el color innato de esa especie era de color verde.
Y además, si le sumabas el hecho de que esta podía hablar de forma tan fluida, decía mucho sobre ella. Si tuviera que darle una clasificación a esa criatura, sin lugar a dudas sería la clase de 'bestia divina'. Los seres que entran en esa clase no tienen igual. Él esperaba estar equivocado con respecto a esa flor que había traído D. No quería pensar que él pudo derrotar tan fácilmente a una criatura de esa categoría. Además, otra cosa a tener en cuenta era que se rumoreaba desde tiempos antiguos que ese tipo de flor podía maldecir a sus adversarios y matarlos lenta y dolorosamente. Lo peor de todo es que no había forma de defensa contra eso; es simplemente letal para cualquier ser vivo.
Lia se encontraba sentada. Su cara no mostraba signos de ninguna clase de dolor. Estaba más que claro que no sentía absolutamente ninguna molestia. Por otro lado, de vez en cuando se le escapaba una risilla. Claro que estaba pensando en el premio que le darían.
De esta forma, pasaron alrededor de 30 minutos desde que empezó el proceso de filtrar la energía en la niña. Entonces, se escuchó la voz de D.
- LA PRIMERA ETAPA FUE UN ÉXITO, SE PROCEDERÁ A INICIAR LA SEGUNDA ETAPA.
La primera etapa resultó ser un éxito rotundo. Esta etapa consistía en llenar todo el cuerpo de la niña elfo con la energía del cubo. Una vez que estuvo completamente lleno de energía su cuerpo, de inmediato D dio inicio a la segunda etapa del proceso, que consistía en controlar el maná que había filtrado con anterioridad. Esto se hizo con la finalidad de que no se escapara del cuerpo la energía que había filtrado y, utilizando esa misma energía, comenzó a hacerla circular por todo el cuerpo de la niña. Incluso yo podía sentir el proceso dentro de la niña. Se estaban creando hilos de maná extremadamente delgados que se movían como serpientes por todo el cuerpo de la niña. Se filtraban en el corazón, en las venas, en los músculos e incluso en los huesos. En mi cabeza, podía sentir y ver todo el proceso que se estaba llevando a cabo. Era un proceso simplemente hermoso. Incluso se filtraron en los canales que se suponía que era por donde normalmente fluía el maná.
'Hermoso.'
Eso fue todo lo que pude decir en mis pensamientos. El proceso que se estaba llevando a cabo era minucioso, y una vez más me di cuenta del control absurdo y monstruoso que tenía D sobre esa energía. Yo no era capaz de hacer tal cosa. Después de todo, a lo mucho podría mover un poco la energía que ya se ha separado de mi cuerpo, pero él era diferente. Incluso si la energía salía de nuestro cuerpo, él aún era capaz de controlarla y mantener una conexión con ella.