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—Joven Señor, ¡no debe caer en las trampas de este muchacho! ¡Ha puesto todo sobre la mesa y te ha desafiado. Probablemente tenga malas intenciones! —advirtió Peng Hai.
Peng Yun sonrió con confianza y dijo, —Tío Hai, tú también eres demasiado cauteloso. ¿Mi fuerza, acaso aún no la conoces? Con mi fuerza, si no puedo derribar a un insignificante Señor Dragón Nivel 4, ¿cómo mandaré en la Región Dongming en el futuro? Si ni siquiera me atrevo a aceptar el desafío del Señor Dragón, ¿qué calificaciones tengo aún para heredar el Clan Gran Roc de las Mil Montañas? Cualquier estratagema que tenga, que la desate. ¡Este Joven Señor la recibirá toda!
En efecto, esta era una batalla con victoria asegurada. Peng Yun no tenía motivo para rechazarla.
Nivel 5 contra Nivel 4; había una diferencia de un gran límite. Si aún así perdiera de esta manera, entonces él, el sucesor del Clan Gran Roc de las Mil Montañas, tampoco tendría cara para salir y mezclarse en el futuro.