Punto de vista de James
Beta Legolas se acercó a mí mientras yo estaba parado, escuchando las divagaciones de Emily con veinte nuevos miembros de la manada. Realmente no estaba prestando mucha atención; quiero decir, Simón era quien prestaba atención. Mi verdadero yo todavía estaba confundido y entristecido por no poder proteger a ninguno de mis miembros.
—Alfa James, si no le importa, los otros miembros quisieran conocerlo antes de que dejen la manada —Beta Legolas me susurró, y mi respuesta era, por supuesto, decir que sí, pero ¿qué sucedió?
—No quiero conocerlos. Basura como ellos debería haberse ido de aquí hace tiempo para nunca volver, y llevarse sus pertenencias con ellos, no hablar demasiado —esa no era la respuesta que jamás hubiera querido que saliera de mi boca. Intenté tomar control de mi cuerpo, pero el resultado fue un fracaso. Incluso Beta Legolas no podía creer mi respuesta.
—Entonces, ¿realmente no quieres conocerlos? —Beta Legolas me preguntó de nuevo.
