Mostré una expresión de desánimo. Sasha extendió su mano y tocó ligeramente mi cabeza.
—¿No acabo de decir que incluso el rey de los Licántropos está relacionado con nuestra familia? Entonces, ¿cómo puedo derrotar a una familia por mí misma? Igual que tú. Es irreal pensar que puedes escapar de Miguel por ti sola.
—No quería escapar —murmuré, sin querer permitir que la historia de Sasha terminara—. Entonces, ¿qué pasó?
—Luego, fui capturada y encerrada en mi dormitorio. Mi padre me dijo que me encerraría hasta el día antes de la boda y me enviaría a casarme con él. Sería marcada en la boda —dijo Sasha—.
—¿Entonces te casaste? —Mi mandíbula se cayó de la sorpresa—.
—No —Sasha sonrió con suficiencia y dijo—. Soborné a una criada para que me trajera comida y le dije que contara a todos que había dormido con hombres extraños todos los días durante mi escape.
—¿Qué? ¿Estás loca? —La miré con shock—.