Punto de vista de Valencia
Estaba conmocionada.
¿Aunque realmente existía una palabra para describir lo que estaba sintiendo? La situación se estaba volviendo más peligrosa y cuanto más cercano y depredador él se volvía, más atraída me sentía hacia él.
Había algo en su aura; la manera en que me tocaba, me reclamaba, me hacía sentir poseída, todo gritaba que lo aceptara y que simplemente hundiera mis dientes en su cuello.
Perdida en mis pensamientos, rápidamente me vestí, sonrojándome al darme cuenta de lo mucho que Maverick había controlado hasta ahora, o de lo contrario, habría terminado viéndome desnuda, lo que sería vergonzoso para ambos.
—No creo que hubiera sido vergonzoso para él ni para nosotras. Habríamos abierto de par en par estas piernas nuestras, y él nos hubiera adorado como merecemos —dijo Aurora, quemando aún más mis oídos con sus palabras obscenas.
La miré con una mirada intensa mientras ella me devolvía la sonrisa con descaro, haciéndome suspirar.
¡Toc, toc!