—Fat Wang gritó y Yang Gang se levantó de un salto, cogió su arma y dijo a los demás que vigilaran las otras direcciones.
—Llevó a dos personas con él y se quedó al lado de Fat Wang, iluminando con la linterna hacia adelante.
—De entre la niebla, apareció una figura.
—Se agarraba el pecho, avanzando tambaleante como si hubiera perdido el alma.
—No era un monstruo, sino una persona.
—Estaba cubierto de sangre, gritando sin cesar: "Muertos, todos están muertos. Hay fantasmas aquí, ¡hay fantasmas!"
—El sonido era tan lastimoso que daba escalofríos escucharlo en plena noche.
—Yang Gang gritó: "¡Detente, no te muevas, o disparo!"
—Pero el hombre, como si no hubiera escuchado, seguía avanzando lentamente.
—La mano de Yang Gang estaba en el gatillo y, subconscientemente, intercambió una mirada con Long Fei.
—Long Fei, con expresión curiosa, presionó el cañón del arma de Yang Gang, preparándose para acercarse y traer al hombre de vuelta para preguntarle sobre la situación.