—En el futuro, si Nan Nan y yo resolvemos el problema que has causado, ¿cómo vas a tratar a Nan Nan? Deberías reflexionar sobre esto y no compensar la bondad con ingratitud —dijo Zhai Sheng después de terminar su ducha y vaciar el agua—. Papá, ya es tan tarde. ¿No vas a volver? Estoy a punto de irme a dormir.
Zhai Yaohui mostró una expresión extraña en su rostro. Era como si se hubiera atragantado después de engullir algunos dumplings —. ¿Por qué no puedo quedarme aquí? Hoy dormiré aquí, ¿no puedo? Yo dormiré en la litera de abajo y tú en la de arriba.
Como Zhai Sheng no estaba casado, no solicitó una habitación de suite. Aún se quedaba en una habitación con literas. Solo que Zhai Sheng era el único que se quedaba en ese lugar.