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—Señora, el coche de su familia es realmente espacioso y bonito. Nunca había montado en un coche tan bueno en toda mi vida. Todo es gracias a la buena fortuna de su familia que puedo sentarme en este tipo de coche. Ahora mi vida puede considerarse valiosa —mientras decía eso, Ding Jiayi tocaba todo como si fuera precioso. Sus ojos no paraban de mirar de un lado a otro sin descanso.
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—…
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La madre y los hijos del trío de la familia Zhai guardaron un momento de silencio, especialmente Zhai Hua. Ya había extendido su mano y quería agarrar a Ding Jiayi.
Pensando que ella, siendo soldado, no podía ni siquiera detener a una persona común, Zhai Hua no sabía si sentirse deprimida por su falta de agilidad física o 'admirar' el descaro de Ding Jiayi que había alcanzado un nivel extraordinariamente alto.
