En el depósito de chatarra de Water Seven
Era casi la hora de partir y los Sombreros de Paja tenían a Franky como carpintero, habían dejado el puerto, cuando se encuentran bajo fuego enemigo, siendo, el barco del Héroe de la Marina; Monkey D. Garp, el responsable del ataque, con este último disparando balas de cañón al Thousand Sunny, el nuevo barco de los Sombreros de Paja.
Usopp se encontraba en el depósito de chatarra y veía todo lo que estaba sucediendo, tenía una bolsa negra con él y pensó en un último gesto de bondad para con la tripulación, pensó://después de esto, ya no tendré nada que ver con ellos, a menos que nuestros caminos se crucen en un futuro//. Usopp había sacado su arma y apuntó la bolsa negra, a su objetivo, el Thousand Sunny lo disparó, consiguiendo dejarla dentro del mencionado barco, dirigió su atención a una yagada que se encontraba en el océano, se subió a ella, decidido a enfrentar el barco enemigo. A lo lejos se escuchaba a una persona gritando; -¡oye!, ¡es mi yagada!- a lo que Usopp respondió; -¡No te preocupes, te lo traeré de vuelta, lo prometo!-, continuando su camino, aceleró un poco más y se detuvo. //Adiós, amigos//, pensó mientras una lágrima rodaba por su mejilla, al rato saca su honda y empieza a disparar hacia el barco. El fuego del cañón detuvo su accionar sin dejar de enfocar el barco de los Sombreros de Paja. Retoman los disparos, pero el francotirador retoma el ataque sacando estrellas explosivas, usándolas en contra del barco enemigo, provocando que estos últimos cesaran su ataque al barco pirata sino que ahora efectuarían el ataque hacia el nariz larga, haciendo que este último utilizase el yagada para moverse a tanta velocidad como fuese posible, continuando el ataque hacia el barco enemigo, con la esperanza de que sus ya ex compañeros, pudieran escapar. Finalmente, consiguió que el Thousand Sunny se impulsara a mas de 300km hacia adelante, logrando que, el ya referido barco, pueda escapar. -Sabía que Franky tendría la manera de sacarlos de ahí, he hecho mi parte ahora, necesito irme de aquí antes de que me capturen-, dijo el nariz larga. Aceleró en el yagada e iba lo más rápido que podía, sin percatarse el cañón que venía hacia él, -déjame aquí y vuelve con tu maestro- dijo Usopp en un suave susurro al animal y espero a su final, recibiendo la explosión y viendo sólo la oscuridad.
Continuará...