Alguna vez te has encontrado en internet con alguno de esos extraños anuncios como "¿Si pudieras cambiar algo de tu vida, qué cambiarías?" o cosas por el estilo, bueno, eso me sucedió a mí.
Soy un ciudadano normal de clase media baja con un salario miserable y un jefe que si pudiera, me esclavizaría. Actualmente tengo 32 años y no tengo pareja. Mi vida se siente como una monotonía interminable, una rutina de la que no puedo escapar. Si me preguntas, diría que el declive de mi vida comenzó poco después de los 17 años.
Recuerdo que en mí juventud era un adolescente lleno de sueños y ambiciones, quería entrar en una buena universidad, tener una novia, conseguir un buen trabajo y vivir una buena vida, pero la realidad no siempre es como uno la imagina, por esos años mí familia empezó a enfrentar fuertes problemas económicos, y se volvio imposible entrar en una buena universidad. Nunca fuy un estudiante excelente así que me era imposible aspirar a las becas de la universidades top.
Mi padre en ese momento era el presidente de una pequeña empresa de cervezas, aunque era una fábrica, no tenía suficiente maquinaria para embazar todo lo que producían, así que la mayor parte de la cerveza que se producía se ventia a embotelladora o otra cerveceras de los diferentes estados.
Era un buen negocio con miras al crecimiento, ya que mí padre estaba buscando convenios con algunos embotelladoras para ampliar la producción y poder enbotellar por si mismo todo lo que se producía. Si embargo como todo en la vida cuato más planeas algo, más rápido salen mal las cosas.
El vicepresidente de la empresa, el mejor amigo de mí padre y cofundador de la empresa vacío casi todas las Cuentas de la empresa y se fugó con el dinero, esto para mí padre fue un golpe muy grande del cual no se puedo levantar. Mí padre denunció a ese tipo pero no se le pudo encontrar, ese hombre desaparecio sin dejar rastro, era evidente que ya había planeado hacer esto hace mucho tiempo y ya tenía todo calculado para no dejar huellas.
Después de ese acontecimiento todo callo como por gravedad, se tuvo que vender la empresa y las maquinarias para pagar contratos, deudas y liquidar el sueldo de los empleados , después de deducir todo esto prácticamente estábamos en bancarrota. Mí padre hizo algunos intentos para salir de esta situación consiguiendo algún empleo en el que pueda ganar una suma considerable pero no pudo ser contratado en un puesto alto, ya era en hombre de 40 años que no fue a la universidad ni tenía un título profesional, solo alguien que con su conocimiento empírico y adquirido en el camino fundó y dirigió una pequeña empresa.
Sin encontrar un buen trabajo mí padre desidio usar su auto para trabajar en el trasporte privado de pasajeros, así duro más o menos un año y medio hasta que murió en un accidente de tránsito provocado por un bus que se quedó sin frenos.
Con todos estos suceso uno tras otro nunca pude dar mí cien por ciento en la universidad ya que tenía que trabajar a medio tiempo para costearme mis gastos y parte de los semestres, con todas estas dificultades alcance a graduarme como ingeniero civil aunque uno no muy bueno, logré conseguir un empleo en una pequeña constructora, ganó lo suficiente para mantenerme y darme algunos lujos
Una noche, después de un día especialmente agotador en el trabajo, me encontré navegando sin rumbo en la web. Mi mente estaba nublada por la fatiga y el desánimo. Fue entonces cuando apareció ese anuncio. "¿Si pudieras cambiar algo de tu vida, qué cambiarías?" Lo miré con escepticismo, pero algo en mí se detuvo. Tal vez era el cansancio hablando, o tal vez una parte de mí todavía tenía esperanza. Sin pensarlo mucho, hice clic.
La pantalla parpadeó y una nueva ventana emergente apareció con una pregunta directa: "¿Qué cambiarías de tu vida?". Dudé por un momento, pensando en todas las cosas que me molestaban. Mi trabajo, mi situación económica, mi soledad. Escribí la respuesta rápidamente, casi con rabia. "Quiero una segunda oportunidad. Quiero volver a los 17 años y arreglar mi vida."
Presioné enter y la pantalla se oscureció. Me reí de mí mismo por haber caído en algo tan ridículo y cerré la computadora, pensando que no pasaría nada. Pero al día siguiente, todo cambió.
Desperté en una habitación que no reconocía al principio. Las paredes estaban cubiertas con pósters de bandas de rock y equipos de fútbol, cosas que había dejado atrás hace mucho tiempo. Me levanté rápidamente y corrí hacia el espejo. Lo que vi me dejó sin aliento. Reflejado en el espejo estaba mi yo de 17 años.
Mi corazón latía con fuerza mientras intentaba procesar lo que había sucedido. ¿Era esto un sueño? ¿Una alucinación? Pero todo se sentía demasiado real. Miré mis manos, mis brazos, mi rostro. Era como si hubiera viajado en el tiempo, como si mi deseo se hubiera hecho realidad de una manera inexplicable.
Con el corazón todavía acelerado, salí de la habitación y encontré a mi madre en la cocina, preparándo el desayuno como solía hacer. Me miró y sonrió, sin darse cuenta del torbellino de emociones que estaba viviendo.
"Buenos días, Maicol"
"B buenos días" respondí inconscientemente su saludo. Continúe caminando con pasos lentos y tembloros hasta la sala en donde vi a un hombre leyendo un periódico y tomando una taza de café.
Quizás al escuchar mis pasos sobre el piso de madre, mi padre alzó la cabeza me la miró con una sonrisa.
"Buenos días, Maicol" me dijo y tomó un sorbo de café.
Al escuchar su voz nuevamente sentí como si un rayo atravesará mi cuerpo. Sin responder a su saludo avance con largos pasos y abrace a mi padre. Mi padre un poco sacado de honda por mi comportamiento me palmeó la espalda dos veces.
"¿Que te pasa, no me digas que ahora después de grande tienes pesadillas?"
"Yo solo..."
"Maicol, aún no has ido a bañarte, apresurarse que llegarás tarde"
Cuando iba a responder a la pregunta de mi padre una voz me interrumpió sacándome de mis pensamientos.
"Ah, ok mamá ya voy"