La muerte de la Condesa Cherry Lloyd conmocionó a la alta sociedad al día siguiente. Un comerciante que viajaba desde el amanecer encontró su carruaje destrozado en lo profundo del bosque y, al revisar su interior, quedó horrorizado por el estado desfigurado en que se encontraba. Era irreconocible. De no ser por los objetos en su equipaje que podrían indicar quién fue la víctima de este atroz e inhumano ataque, habría sido otra jane doe.
Mientras algunos protestaban por justicia, lo inevitable surgió.
Lo primero que todos querían saber era, ¿a dónde se dirigía la Condesa Lloyd, la dama de compañía de la princesa heredera, en medio de la noche? Cherry no podía iluminar a todos ya que los muertos ya no pueden hablar. Así, diferentes conclusiones surgieron en la alta sociedad.