De vuelta a Abel...
No era un secreto para algunos individuos cómo resultaría esta competencia de caza. Joaquín finalmente usaría el sello. Tal como Aries esperaba, un rumor había estado circulando por las calles.
Este rumor no era el tipo del que usualmente habla todo el mundo. Era un rumor que se discutía principalmente en las calles estrechas, pasando el mensaje discretamente.
Decía: los guerrilleros atacarían pronto. No importaba si había algo de verdad en este rumor o de dónde venía. Lo que importaba era que la idea estaba allí.
Un incidente tan grande como un ataque al príncipe heredero o a los nobles solo demostraría que los luchadores por la libertad no eran más que un grupo de bárbaros atacando a las realezas sin provocación. Con una pieza de evidencia... como el sello oficial, era fácil atribuir todo a ese notorio grupo que había resistido el gobierno de la familia real durante años.