De vuelta en el Palacio Lazuli…
Cuando Joaquín dejó la sala de estar donde tuvo una discusión privada con Cherry, planeaba regresar al salón de banquetes para reunirse con Aries. Sin embargo, se encontró de pie fuera de la habitación y frente a la ventana. Las manos en su espalda, los ojos en la espesa oscuridad afuera.
—Eso es extraño… —se estrechó su ojo, la expresión severa—. ¿Por qué…?
Esa pregunta había estado rondando por su cabeza desde que se separó de Cherry. No podía evitar recordar su breve conversación con ella mientras permanecía en silencio.
—No tengo una noche entera para complacerla, Condesa Lloyd —habló en el segundo en que entraron en la sala de estar, parándose en medio mientras se giraba hacia ella que estaba de pie frente a la puerta—. Espero que esto sea lo suficientemente importante como para tomar un momento de mi tiempo.
Cherry frunció los labios mientras tomaba aire profundamente.