—¿Por qué? —preguntó Tania confundida.
Rolfe sonrió mientras se situaba frente a ella. —Porque existe la posibilidad de que aparezcan tus alas. Si aparecen, Ileus tendrá que usar su hechizo de desbloqueo. Esta parte de Yunabi sacudirá tus instintos naturales...
Una pequeña semilla de entusiasmo cobró vida en su estómago cuando pensó cómo serían sus alas y si sería capaz de... manejarlas. Su estómago se anudó con anticipación, sobre todo porque apenas había imaginado que tendría alas, y mucho menos una madre fae. ¿Cómo sería estirar sus alas y tomar el cielo? Siempre había sentido esta picazón en su espalda desde que recordaba. Eltanin había notado esas franjas de luces blancas en su espalda. A menudo, tenía este fuerte impulso de desplegar algo y ser libre, pero siempre despertaba a la realidad.
Cuando Rolfe dijo que podrían aparecer sus alas, sus ojos se empañaron de emoción mientras las emociones le ahogaban la garganta. —¿De verdad? —preguntó con voz ronca.