Puesto que el asunto fue decidido por el anciano, no tenía lugar para decir nada. Solo podía seguir el juego y ver qué sucedía.
Si Zhao Youlin realmente tenía algún motivo oculto, independientemente de si contaba con el apoyo del viejo maestro detrás de ella, haría lo que fuera para echarla de su casa. No le daría ninguna oportunidad de hacerle daño a su familia.
Sin embargo, si Zhao Youlin realmente se preocupaba por ellos, no le importaría tener otra hija. Después de todo, siempre había sabido que Duan Yarong quería un hijo, y él no había podido dárselo. Sin mencionar que el único que tuvieron... Ese era su mayor arrepentimiento en la vida.
—Zhao Youlin sonrió tímidamente, asintiendo y diciendo, "De acuerdo".
—Duan Yarong se sintió aliviada al ver que se llevaban bien el uno con el otro. Había tenido la intención de pasar más tiempo con Zhao Youlin y su hijo.