Habiendo dicho esas palabras, este chico de mirada sincera miró a esta chica frente a él con gran esperanza y esperó su respuesta.
La propuesta de este chico no conmovió a Gu Weiwei sino que la hizo sentir algo impaciente.
—Señor Qin, no tengo interés ni en ti ni en Italia —respondió ella con firmeza.
Mu Weiwei había soñado con estudiar en Italia, pero ya no era Mu Weiwei.
Era Gu Weiwei, estaba en sus 20 años y verdaderamente no tenía interés en adolescentes.
—Mu Weiwei, ¿no escuchaste lo que acabo de decirte? Fu Hanzheng no es un buen hombre, ¡tú no lo conoces! Quedarte a su lado te ... —insistió el joven.
—Qin Lv, si no estás dispuesto a ser mi tutor, por favor vete —Gu Weiwei lo interrumpió fríamente.
Había pensado que Fu Hanzheng era un tirano, pero cuando renació como Mu Weiwei, descubrió que no era tan terrible después de todo.
Había sido bastante tolerante con ella y con la molesta Mu Weiwei que solía acosarlo en el pasado.