Después de la rueda de prensa, Tao Wei se acercó a Yan Jinyi, que aún estaba pensando cómo dar a Tang Qing la lección más dolorosa de su vida.
—Jinyi, hay algo que necesito que le digas a la Segunda Joven Señora Huo.
La primera reacción de Yan Jinyi fue pensar que el asqueroso hombre Lin Chenggong estaba tramando otra de sus sucias jugarretas.
—¿Qué es? —preguntó ella.
Tao Wei dudó y luego le entregó un formulario a Yan Jinyi. —Casi todos los cines nacionales famosos nos han rechazado y no tienen intención de proyectar nuestra película. En cambio, han programado muchos horarios de proyección para 'Isleño'.
Yan Jinyi pasó las páginas del formulario y vio que había algunas notas en él. La mayor parte de la información trataba sobre Tang Qing prohibiéndoles proyectar la película y comentarios sobre la mala reputación de Tao Wei.
—No importa lo buena que sea nuestra película, si ningún cine está dispuesto a proyectarla, solo podemos...
