—¿Querías que se fuera?
—En su opinión, ¡Lu Qiyuan era quien debería irse!
—¡Decir esas cosas sin importar la ocasión!
—Lu Qiyuan se rió burlonamente. —¿Puedes hacerlo tan abiertamente pero te asusta que la gente hable de ello?
—¿Por qué tenía que tener cuidado, si no tenía nada que ver con él?
—Incluso si los reporteros lo escucharan, los que tendrían mala suerte serían Du Lin y Lu Man.
—Esta era una buena oportunidad para difundir esta noticia y reducir los rumores desenfrenados sobre Lu Qi.
—Pero, ¿quién era Lu Man?
—Ahora era una oficial de relaciones públicas profesional e instantáneamente podía adivinar lo que Lu Qiyuan quería hacer.
—Por una hija, no le importaba sacrificar la reputación de otra hija.
—Lu Man se rió con enfado. —¿No era este el estilo de Lu Qiyuan todo el tiempo? En aquel tiempo, Lu Qi en realidad no necesitaba ir a la cárcel, pero por la reputación de Lu Qi, él la había incriminado para que ella fuera a la cárcel.