—La habitación en la que te quedabas está vacía. Ve allí tú mismo —dijo Liang Xun.
Shen Yu asintió y miró a Zhu Ling de nuevo.
Zhu Ling ignoró las inexplicables emociones en su corazón y se levantó para seguir a Shen Yu escaleras arriba.
La habitación en la que Shen Yu se quedaba estaba en el segundo piso. Los dos subieron las escaleras sin decir una palabra, con las expresiones sombrías.
El corazón de Zhu Ling estaba hecho un lío. Esta era la primera vez que tenía tal sensación. Le habían confesado su amor muchas veces en el pasado, pero no era como esta vez. En el pasado, podía rechazar al hombre sin expresión alguna, pero esta vez, estaba en conflicto. ¿Qué debería decir más tarde para no lastimar la amistad entre ambos?
Después de todo, Shen Yu era de verdad una buena persona.
Probablemente porque estaba segura de que Shen Yu era su amigo.
Sin embargo, algunos amigos que ella conocía le habían confesado su amor antes. En ese momento, ella también fue muy decisiva.
