Todos se volvieron al unísono hacia el anciano que interrumpió a la anciana señora.
En el momento en que Ye Wanwan, que había estado observando desde un costado, vio al anciano vestido con traje Tang hablar, el espacio entre sus cejas se contrajo.
—¿Qué pasa? —frunció el ceño la anciana señora.
El anciano vestido con el traje Tang lanzó una mirada sutil y fría en dirección a Xu Yi, luego dijo a la anciana señora, "Cuñada, he recibido información últimamente, pero como no la he investigado ni verificado, no quería mencionarla. Pero ahora que nuestro maestro ha sido atacado, sumé dos y dos y para mi sorpresa, ¡algo no cuadraba! Este asunto es grave y personalmente soy incapaz de juzgarlo, así que espero que la cuñada y todos los presentes aquí se unan para investigar este asunto."
Observando esta escena frente a ella, la expresión de Ye Wanwan cambió.
Era exactamente como había esperado —las cosas se estaban desarrollando justo como habían ocurrido en el pasado.
