Desde que sucedió el incidente, la salud psicológica de Han Xianyu había estado deteriorándose y Fei Yang no podía dejar de preocuparse por él.
Después de todo, este incidente no solo afectó su carrera y vida, sino que también tuvo un impacto en su estado mental.
Han Xianyu ayudó a esos niños por bondad, sin embargo, fue calumniado y incriminado; él no cometió ningún crimen pero tuvo que vivir con esa infamia por el resto de su vida.
Esto mientras que esa pareja codiciosa seguía royendo su carne y ganando la simpatía de toda la sociedad. En el futuro, sin duda, vivirían lujosamente con esa desorbitada compensación.
Si no fuera por el joven que apareció hoy, la empresa obligaría a Xianyu a resolver este asunto en privado. Si eso realmente sucediera, no podría predecir si Xianyu aún sería capaz de aguantar o no.
Viendo que Han Xianyu permanecía en silencio, Fei Yang lo consoló: