—Bo Jinchuan frunció el ceño —dijo—. ¿De qué te has dado cuenta? Yo acabo de entender lo que sucedió hace segundos y me dices que ya lo sabías?
—Está bien, dime entonces, ¿qué quieres aclarar? —exclamó.
—Shen Fanxing lo dijo todo de un solo aliento, la ira y la resignación evidentes en su tono.
—Cuando un hombre había besado a una mujer y le dijo que no lo había hecho en serio, ¿qué significaría eso?
—Bo Jinchuan se calmó de repente y la observó durante un largo rato antes de preguntar —¿Por qué estás enojada?
—¡No lo estoy! —afirmó Shen Fanxing con voz tensa, y luego giró la cabeza hacia un lado.
—Una risa suave se escuchó mientras el hombre continuaba —Estás enojada… mujer poco encantadora.
—Shen Fanxing frunció el ceño, se giró y respondió —Lamento decepcionarte, señor Bo, porque…
—Sintió de repente una voz que venía desde la parte superior de su cabeza y dejó de hablar.