Cinco minutos después, Shen Fanxing regresó a su habitación.
Cuando vio a Bo Jinchuan y recordó la escena violenta y sangrienta de antes, no se atrevió del todo a enfrentarse a él.
—Ahora mismo...
—No es nada. Pensé que serías más valiente.
Shen Fanxing se lamió los labios y dijo:
—Un asesinato debe pagarse con la vida. No quiero pagar con mi vida por alguien como él.
Luego recordó lo que Bo Jinchuan había dicho hace un momento. Preocupada, le recordó de nuevo:
—No puedes matar a nadie, ¿de acuerdo? Especialmente tú. ¡No vale la pena sacrificar tu vida!
Bo Jinchuan apretó imperceptiblemente los labios y preguntó:
—¿Qué planeas hacer a continuación?
Shen Fanxing ordenó el desorden mientras respondía,
