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—La esposa de Xia Zhe dijo que no especificaste la edad del ginseng que querías y no había otros detalles. Esto es todo lo que tenemos para ofrecer —dijo Xia Mao.
Sentado en la residencia Xia, el dolor de cabeza de He Ning se alivió bastante. Podía oler la misma fragancia de antes.
Después de su visita en la mañana, tuvo un dolor de cabeza intenso media hora después de dejar la casa de la familia Xia. Ahora que estaba sentado dentro de la casa, su dolor de cabeza se había aliviado mucho. Parecía que la familia Xia realmente tenía algún tipo de tesoro en su casa.
He Ning miró detenidamente el corredor de la familia Xia, el balcón, las esquinas y el patio trasero. Aunque había flores y plantas colocadas en todos estos lugares, eran los mismos tipos que él había tenido en su casa antes y eran solo plantas ordinarias. ¿Podrían estas plantas ser aquí alguna forma de versiones mutadas?
—20 años es demasiado corto —dijo He Ning frunciendo el ceño.
