—En cuanto a eso... solo quería evitar problemas innecesarios en casa... Después de todo, mi madre ya está tan vieja —Kong Lu todavía trataba de explicarse.
—Aún ahora, sigues defendiendo a tu madre. ¡Realmente eres el buen hijo de tu mamá! —Xia He suspiró y se sentó débilmente en la cama.
—No la estoy defendiendo. Solo quiero que sepas lo que estoy pensando —dijo Kong Lu.
—¡Bien! Entonces no hablemos de tu madre. ¿Qué hay de tu hermana menor? —preguntó Xia He.
Kong Lu también sabía que Kong Li era inmadura. Como su hermano mayor, pensó que era inapropiado para él disciplinar a una chica que ya estaba en edad de casarse. Sin embargo, su decisión había provocado que su comportamiento empeorara con el tiempo.
—Mi hermana aún es joven. No sabe comportarse... —dijo Kong Lu.