-¡No vuelvas a insultar a Fress en mi puta presencia!
El grito de Finley estaba lleno de espíritu de amor por su esposa, el pese a que no podía utilizar sus brazos, si pudiera continuar peleando sosteniendo su hacha con la boca, estoy seguro que lo haría.
Al menos lo habia dejado sin poder ocupar ambas brazos, pero no es que yo pudiera seguir más con esto, me deje caer al suelo frente a él, el pitido que escuchaba era muy fuerte, además el mareo que estaba sintiendo me obligo a sentarme.
-Te sientas... ven y acaba conmigo de una vez, compórtate como un hombre Gran.
-Eso hago a diferencia de ti que solo se esta dejando llevar por la ira, ahora cierra el pico y escúchame cerebro de musculo.
Finley se arrodillo, le habia roto el espíritu al ganarle la batalla.
-No, acabaste con mis brazos, ahora acaba conmigo, al menos Willfest te tuvo que haber enseñado honor, ¿o no?
-Con algo de tiempo y curaciones tus brazos deberían estar bien, no corte los tendones... o eso espero, no soy experto en ello, solo quería detenerte imbécil, así que al menos vas a escuchar lo que tengo que decir, si, despues de eso insiste en que te mate, lo hare.
-No hay nada en el mundo, que me haga cambiar de idea Gran. - Dijo Finley enojado.
-La idea de liberar Irlanda, ¿acaso no te agrada?
Finley se reía como un desquiciado, como si estuviera riéndose de un loco, alguien que estaba diciendo estupideces, o incoherencias.
-Tú liberar a Irlanda, estas loco, dime como un Ingles, podría ser semejante cosa.
-Primero, desbaratando a los Duques, uniendo sus puebles, que por lo que me he enterado ponen problemas para cooperar juntos, luego buscar el apoyo de lo nórdicos que residen por la zona, y pedirle ayuda a escocia, prometiéndoles ayuda en su liberación, antes eso si tendría que convertirme en el Justicar, pero ya trabajo en eso, obviamente hay más cosas que hacer, pero ese es el plan a grandes rasgos... actualmente como debes saber ya soy un Sir, ahora trabajo en acabar con el Duque de Leap, Finley, el mismo que acogota a Mordagfell con los impuesto con la ayuda del Barón Mons, puedo liberarlos, si es que aun queda pueblo, despues de que en este momento esta siendo atacado por Argus probablemente.
-¿Cómo que esta siendo atacado por Argus?
-Segun fuentes históricas... digo según mis espías, Argus es el que planeo esta invasión cerca de los terrenos de Mons, el lo hizo para poder obtener las tierras de los pueblos más alejados de Leap, así que es muy probable que Mordagfell este siendo atacado en este momentos, puedo equivocarme también, pero es una posibilidad, todo depende de que tan lejos llegue ese Creyback.
Finley negaba con la cabeza, evitando creer lo que decía.
-No, no es posible, Argus siempre nos a ayudado a escondidas de la corana, te equivocas, además todo lo que dices de liberar Irlanda y esas tonterías son mentiras estoy seguro, solo quieres poder, un niño que juega al juego de tronos.
-No quiero la corona Finley, solo me interesa vivir en calma, tal vez con algo de suerte encontrar mi camino de vuelta a casa, pero fue Helen el que me metió la idea de liberar a Irlanda, aunque no se dio cuenta, la primera vez que salimos, ella me invito a un bar Irlandés, el trébol verde, en Dublín...
-Lo conosco, lo atiende ese gnomo, ve al grano.
-Todos se veían tan felices, libres, nadie pensaba en sus problemas, solo se divertían a base de sus creencias, yo dije es así como debería ser la vida, con el tiempo saliendo con ella me di cuenta de eso, y encontrando mi camino con Morrigan como puedes ver en mi armadura.
Finley me miraba directamente a los ojos, buscando algún signo de mentira, pero nada de lo que le decía lo era.
Desde acá escuchábamos como nuestros compañeros seguían luchando, me extrañaba que Willfest no viniera en mi ayuda, pero ya habiendo experimentado como es luchar en una guerra, me podía imaginar el porque.
Me sentía algo orgulloso de mi, por mucho que me afectaba todo lo vivido en este ultimas horas, la cantidad de gente que mate, y que vi morir, me sorprendía de mi mismo que no me habia derrumbado.
-No te creo nada Gran, me rehusó a creerte, no permitiré que un Ingles se llene la boca de palabras de libertad de mi pueblo o cosas por el estilo...
-Ustedes tienen un serie problema, déjame decirte nuevamente, que nací en otro país, no en Inglaterra, solo mi padre era ingles, mi madre vivía en chile, aunque, no se parecía a una chilena en verdad, pero me desvió de lo importante, tanto odio le tienen a los ingleses, se perdieron, ellos no son malos, deberían concentrar su odio en los que gobiernan ese país no a su gente.
-Sigues siendo un cacharro de un ingles, sigues siendo el niño que maltrato a mi Fress, y las otra palabrería es eso sin más, que no odiemos a su gente, cuando ellos nos a pisoteado toda la vida.
-Hablar contigo Finley es como hablar con Vel, un caso perdido, escúchame, te necesito viejo amigo, con tu ayuda...
El rostro de Finley se desfiguro de rabia.
-No somos amigos, no vuelvas a decir esa palabra, mal agradecido, no te das cuenta como la dejaste, pedazo de mierda, arruinaste su belleza, le arrebataste una de sus manos, la traumaste de una manera que ni siquiera habla, ella ya no es lo que era, maldito desgraciado, la mataste en vida.
-¿Que esperas que hiciera?, que dejara que me matara cuando asaltaban la torre de los impuestos, que dejara pasar lo que le hizo a Lay, Finley, ¿contéstame puto imbécil?, eso tenia que dejar que sucediera, como será que incluso Hel se dio cuenta de lo equivocados que están, y eso que yo pensaba que la iba a perder despues de que la viera.
Finley miro al cielo donde la lluvia seguía empapándonos, a mi no me quedaban más fuerzas para seguir luchando, pero aun me quedaba toda una guerra por delante.
-Solo mátame Gran, igualmente están condenados, al menos tengo el consuelo de que morirán.
-No Finley, ya se sobre los hombres apostados en el bosque, Willfest con los muchachos deberían estar haciéndose cargo de eso ahora.
-No eso es imposible, solo un grupo de...
No podía decirle que lo sabia gracias a que vengo del futuro y la pista que me dio Hel.
-Lo sé y punto Finley, ya se acabo, pretendo ganar esta disputa lo necesito para hacerme un nombre, pero descuida, como te dije voy a liberar a Irlanda, necesito tu ayuda Finley por favor, no te pido que me disculpes, se que no lo harás, como yo tampoco pediré disculpas por lo que hice, vamos ayúdame a que Irlanda sea libre.
Finley seguía en su escrutinio, buscando alguna mentira en mis ojos, mientras más buscaba menos encontraba y eso lo hacia enojar mucho más.
-No caeré en promesas vacías Gran, no más, acaba con mi vida, de una vez, ya no quiero tener que ver más con esto.
Yo insistía en que nos ayudáramos, pero no quería atender a razones, durante mis intentos fallidos, sucedió algo que me descoloco, un cuervo se apoyo en mi hombro, me miro fijamente, y froto su cabeza con mi media mascara.
-¿Morrigan?
-Ahora si que se te fue la cabeza, muchacho, que creas en Morrigan y que un cuervo se te apoye en la cabeza no significa que...
-Cállate sucio mortal.
La "calma" si se podría decir que habia entre Finley y yo desapareció de golpe cuando el cuervo hablo con una voz femenina, a mi me calo los huesos cuando la escuche hablar, pero Finley estaba mucho más afectado que yo.
-Gran un aviso, mi cuervito, estas perdiendo mucho tiempo, si sigues así con esta basura, perderán, te necesitan arriba Gran, necesitan a mi pequeño campeón, y por ahora quítate esa mascara, que vean tú hermoso rostro Granet.
Debía admitir que no me esperaba que Morrigan apareciera de la nada.
-Gracias por la invitación a cuervito mío.
Eso fue lo ultimo que dijo Morrigan antes de irse a volar, yo me quite la mascara como me dijo.
-Bien Finley, ya oíste, pero tengo que irme, así que intentare una ultima cosa, una apuesta, si yo gano, me servirás para liberar Irlanda, si pierdo te considere la muerte que me pides, piénsalo rapido, el tiempo vuela.
-¿Cómo es qué Morrigan te habla?, no es una broma, nosotros siempre hemos vivido para ella, acaso se burla de nosotros, como es que nuestros propios dioses se vuelven en nuestra contra.
Finley se reía como si hubiera perdido la cordura, dolía verlo, parecía como si su mundo se hubiera roto frente a el, y no podía culparlo, no creo que el que se aparezca una diosa de la cual siempre creíste y apoye a el que consideres tu enemigo sea muy bueno, o tal vez solo sea la aparición de la diosa, ¿Quién sabe?
-No tengo ni idea de como responderte, ni siquiera se que ve en mi, pero eso no es lo que te pregunto Finley, escucha de esto se trata la apuesta...