—Punto de vista de Asher Frostblade.
4:00 AM.
Haciendo mis cosas como el día anterior en mi habitación, me di un baño de unos veinte minutos.
4:21 AM.
Me puse mi uniforme de la academia, observando el color negro con bordes dorados y el logo de la academia impreso justo al lado del pecho, en la parte donde está el corazón. Tardé solo cinco minutos en alistarme.
4:26 AM.
Luego me peiné el cabello y lo arreglé al estilo favorito de mi vida pasada. Tardé solo cinco minutos.
4:31 AM.
Finalmente terminé todo y, mirándome al espejo, simplemente dije las mismas palabras de siempre: "perfecto". Luego me senté en el círculo que estaba en medio de la habitación y comencé a meditar y absorber el maná que circulaba en los alrededores. Tardé media hora.
5:00 AM.
Asher salió de su habitación y se dirigió al salón de la clase uno, donde el grupo ya estaba reunido.
Aunque la primera materia sería a las seis, los cadetes suelen llegar más temprano de lo común, y Asher también lo hace. Después de todo, levantarse temprano no es una molestia para él.
Sentándose justo al lado de Grey, con Julián al otro lado, Asher miró hacia el podio.
"Hoy será lo mismo", dijo Julián.
"No, tenemos seis días de la semana en los que estaremos en este salón desde las seis hasta las nueve de la noche. Cada día hay materias diferentes, a excepción de la alquimia, que es todos los días", explicó Grey a Julián.
Eso es más que obvio. En un día hay menos de cinco materias que pueden ofrecer, por lo tanto, tienen que dar una sola materia una vez a la semana. Después de todo, cada materia suele durar entre dos y tres horas, con explicaciones, teorías, preguntas, demostraciones y pruebas. Es algo fácil de ver, pero entender es todo lo contrario.
Por supuesto, esa rutina en la que los cadetes solo están sentados es solo por un mes. Después de que pase el primer mes en la academia, las cosas serán diferentes.
"Oigan, ¿por qué aún no entregan los puntos de crédito?"
Esa fue una pregunta que un cadete le hizo a un profesor. El profesor respondió que en cualquier momento se les entregarían los puntos a los cadetes de primer año, por lo que se desconoce cuántos puntos y en qué momento serán entregados.
Al escuchar la pregunta de Julián, Asher y Grey lo miraron.
"Tienes razón, pero ya nos aclararon eso".
"Así es".
"Aun así, ¿no les parece confuso que aún no nos entreguen los puntos? Más allá de eso, últimamente siento que algo anda raro en la academia respecto a los cadetes de años superiores y los puntos de crédito. Todo está relacionado con los puntos".
"..."
"..."
Asher y Grey se miraron al mismo tiempo.
Las palabras de Julián tenían toda la razón. Por una parte, Asher también había notado algo extraño, al igual que Grey, pero cuando un cadete le preguntó a un profesor el día anterior, Grey y Asher lo dejaron pasar como si fuera algún problema de que los profesores no están seguros de cuántos puntos entregar.
Después de todo, es como unos cálculos que deben hacer para saber cuántos puntos serán entregados a mil cadetes de primer año.
"Creo que tomará un poco de tiempo", dijo Asher.
"Tienes razón en eso", respondió Grey.
"Clank".
Después de unos minutos de espera, eran casi las seis, pero el profesor... no, la profesora Bridget entró y echó un vistazo a todos los cadetes que estaban sentados de igual manera que el día anterior. Entonces, dirigió su mirada hacia Asher y los demás.
"Otra vez".
Sin dejarse intimidar por la mirada de la profesora Bridget, Asher simplemente la miró fijamente sin pestañear, manteniendo una mirada fría, pero no tanto como para ser una amenaza. En eso, los labios de la profesora se abrieron y sus palabras salieron.
"Los diez cadetes de la prueba de escritura, vayan a la sección de profesores", fue lo único que dijo, luego miró a Asher, frunció el ceño inmediatamente y salió del salón, dejando a todos en silencio.
En eso, Grey habló.
"¿Estamos en problemas o qué fue eso?"
"No tengo idea", dijo Asher.
***
—Cambio de escena.
—Punto de vista de la profesora Aria Bell.
Sentada en uno de los asientos mientras los profesores frente a ella la miraban con rostros de sorpresa, algunos incrédulos, y otros no podían creer lo que estaban viendo.
Aria miró la información en un papel en blanco con unas letras escritas en él, y sus ojos se abrieron de par en par.
Ella nunca pensó que esas preguntas serían respondidas tan fácilmente.
"No solo puede aprender cualquier cosa con solo mirarlo una vez, incluso su inteligencia es incomparable", fueron sus pensamientos al ver cada pregunta, pero más que nada, la profesora Aria miraba y leía una y otra vez esas tres preguntas.
"La prueba escrita..." Al girar la cabeza, la profesora Aria miró a una de las nuevas profesoras, de cabello plateado y ojos rojos, alguien muy conocida.
"Profesora Oriana, usted que cree tanto en este cadete, parece que no se equivocó".
"Je, al igual que ustedes, yo también estoy sorprendida por esto", respondió Oriana.
Los ojos de la profesora Aria se abrieron.
"Entonces, ¿usted conoce a este cadete, sabe de dónde viene o quién es?"
Oriana miró a la profesora Aria y entonces sus labios se abrieron.
"No sé nada de él. Investigué todo lo posible, pero no encontré nada".
"Supongo que es un misterio", Aria suspiró y miró el papel. "Pero, ¿cómo sabe tanto?" fue su pregunta, y entonces los profesores miraron en dirección a Aria.
"Yo también me lo pregunto", respondió Oriana.
No, de hecho, la que más quiere saber sobre ese cadete es Oriana, a excepción de Aria, que apenas conoce al cadete, pero ahora, al ver todo lo sucedido en apenas tres días, la profesora Aria le prestó más atención y su curiosidad se hizo más fuerte.
Al ver cada pregunta respondida a la perfección, no solo eso, sino que incluso las respuestas eran mucho más precisas, como si supiera que las respuestas originales eran incorrectas.
Simplemente, esto era increíble para los profesores.
"Clank".
Entonces la puerta se abrió, y la profesora Bridget entró con una sonrisa en su rostro mientras se sentaba justo al lado de Aria.
"¿Ya los llamaste?"
"Sí", Aria preguntó y entonces Bridget respondió.
Los profesores esperaron unos segundos más hasta que la puerta nuevamente se abrió, y diez cadetes entraron. Todos los profesores de inmediato miraron a un solo cadete.
"Es usted Asher Frostblade, ¿verdad?", un profesor habló.
Era el profesor encargado de enseñar física, con cabello rojo y unos ojos igualmente rojos. El profesor Lucas Wells preguntó a Asher mientras lo miraba con curiosidad.
"Así es", respondió rápidamente Asher sin nada más que decir.
Entonces el profesor Lucas se paró y agarró una pequeña pila de papeles blancos con letras. Luego procedió a entregar las hojas de papel a los diez cadetes.
"Como pueden ver, hay una puntuación de 0/100. Esto es para que sepan cuánto sacaron en la prueba escrita", continuó el profesor Lucas. "Cada uno de ustedes sacó más de 60, en especial Grey, Luna, Freddy y Gloriana, quienes tuvieron el mayor puntaje, superando los 80, pero hay uno en especial que sacó los 100".
Fue entonces que cada cadete, incluidos los profesores presentes, miró a Asher.
El rostro de Asher mostraba confusión ante la situación. Al ver esto, la profesora Aria habló.
"Asher, para ser honesta, las tres preguntas que ninguno de los demás pudo contestar eran, de hecho, preguntas que solo el director Wilbek sabía. Las pusimos porque no sabíamos si en algún momento alguien las respondería, pero tú lo hiciste".
Los labios de Asher se abrieron al darse cuenta de la situación.
"¿Estoy en problemas?"
"No, no es eso. Simplemente te recompensaremos".
Asintiendo, Asher miró a los demás profesores, pero cuando vio una figura familiar, su cuerpo se congeló. Por supuesto, Asher miró a Oriana, quien lo estaba viendo con una sonrisa.
Aria siguió la mirada de Asher y entonces miró a Oriana.
"Parece que se conocen muy bien", pensó ella.
"Se pueden ir. Solo los traje para acá para entregar sus pruebas", dijo el profesor Lucas.
Asintiendo, todos los cadetes salieron de la habitación, pero Asher fue llamado.
"Espera, Asher. Antes de que te vayas, toma las llaves de la sala del comité disciplinario".
Agarrando las llaves que el profesor Lucas le extendió, Asher las tomó rápidamente y luego salió de la sala.
Un silencio inundó todo hasta que Oriana habló.
"Es agradable, ¿no?"
"..."
"..."
No, de hecho, cuando Asher miró a Oriana y Oriana lo miró con una sonrisa, todos los profesores se dieron cuenta de algo entre ellos dos.
Mientras tanto, Bridget permaneció en silencio con el ceño fruncido, sin que nadie la viera.
***
—Cambio de escena.
—Punto de vista de Asher Frostblade.
Mientras Asher caminaba por los pasillos, miró fijamente la llave que el profesor Lucas le había entregado. La llave era normal, pero dorada, como si estuviera hecha de oro puro. Además, tenía un llavero con el logo de la academia y unas letras pequeñas que decían "presidente" en el centro del logo.
Después de regresar al salón, habían pasado unas cuantas horas y finalmente Asher tuvo tiempo libre para ir al salón del comité disciplinario y ver lo que había allí, por supuesto.
Asher salió rápidamente del salón y se dirigió al salón del comité disciplinario, salió a escondidas sin que sus amigos lo vieran y, después de unos minutos caminando, finalmente llegó a unas puertas que eran diferentes a las demás, al final del pasillo.
"Clak."
Entonces introdujo la llave en el orificio de la cerradura y las puertas se abrieron.
"Es lo suficientemente grande", fueron sus primeras palabras al ver el lugar, que era más que nada un espacio lo suficientemente amplio y acogedor.
El suelo de mármol brillaba, el techo estaba adornado con un candelabro que iluminaba toda la sala. Había un sofá en forma de "L", estantes de libros, dos ventanas grandes con cortinas rojas. Más adelante, había una mesa larga con más de siete sillas en ambos lados y una silla diferente de color negro, parecida a una de oficina, al final de la mesa larga. Detrás de la mesa, justo al fondo, había un escritorio grande con una lámpara, gabinetes y una silla moderna y muy cómoda, igual que la silla de la mesa.
Mirando todo a su alrededor, Asher contemplaba completamente la sala. A simple vista, era un espacio amplio con todo lo que un comité debe tener, y por supuesto, la mesa donde se hacen las reuniones entre los miembros del comité y el típico escritorio al final de la sala, con una ventana detrás.
"Es muy agradable", admitió.
Reconociendo que el lugar era incluso más agradable que su propia habitación, Asher se dirigió al escritorio y se sentó.
Luego, colocó la hoja de la prueba escrita en el centro del escritorio. A su lado derecho estaba la lámpara, y al otro lado había unos lápices y bolígrafos.
"Veamos, quizás pueda mover ese sofá, mover el estante para que no estorbe en la mesa y también..." siguió pensando mientras miraba cada mueble de la sala.
En primer lugar, el lugar era espacioso, pero los muebles estaban muy pegados. Por supuesto, Asher no es del tipo de personas a las que no les importa la posición perfecta y la limpieza, por lo que estaba observando cada parte de la sala.
Estaba sucio y había telarañas. Los muebles estorbaban, y todos estaban mal ubicados.
"¿Quién demonios puso el estante ahí?", murmuró.
Al ver que el estante estaba cerca de la puerta y estorbaba en una de las sillas de la mesa, Asher pensó en dónde lo movería.
"Sí, creo que así será. Lo tengo bien pensado, pero ¿cómo se verá después de terminar?", reflexionó.
No solo tenía que limpiar, también debía reorganizar las cosas y mover los muebles.
"Supongo que no podré terminar solo, también necesito a los demás miembros."
Ya habían elegido a tres de ellos, pero ¿los demás aceptarían solo porque son amigos? Después de todo, en un comité los miembros son importantes para que a cada uno se le asigne una tarea en particular, y así el presidente no tenga que hacer todo el trabajo por sí solo.
"Supongo que les preguntaré más tarde. Espero que acepten", pensó Asher.
Con esos pensamientos, Asher primero limpió su escritorio y ordenó algunas cosas que estaban allí. Terminó en unos minutos, y antes de salir de la sala, miró una vez más el lugar y frunció el ceño.
"Realmente necesito mover estas cosas, se ve horrible."
Entonces salió de la sala y fue a buscar a los demás...