—Perspectiva de Luna Hazard.
—Momentos antes.
"¡¡Baam!!".
De un momento a otro, Luna miró la sangre de Asher saliendo de su mano. Su mente se puso en blanco al instante y no reaccionó.
"Goteo" "Goteo" "Goteo"
Luna miró la sangre derramada en el suelo. Su mente entró en un estado de confusión y nerviosismo. No podía reaccionar al instante, no pudo comprenderlo. Ella se sintió extraña, no se pudo mover ni hablar. La sangre continuó derramándose hasta que Gloriana habló, pero su voz era inevitable y temblorosa.
"Asher... Tu—tu mano..."
Es de esperarse. Ver tal escena justo frente a sus ojos fue un acto muy aterrador, algo que nunca quiso ver ni una sola vez.
Luna no podía pronunciar una sola palabra. Ella estaba asustada. Si no fuera por esos dos, estaría muerta. Su cuerpo estaría en el suelo, sangrando desde su cabeza, si esos dos no hubieran detenido esa bala de maná. Ella estaba asustada.
Su corazón latía muy rápido y fuerte, incluso se podía escuchar.
Por supuesto, los gritos de las personas alrededor eran fuertes. Todos decían "corran" y cosas como esas mientras el pánico se apoderaba de todo el edificio.
Los cristales, que en un instante se hicieron pedazos, estaban tirados a su alrededor, pero lo que Luna miraba era más un agujero en la mano de Asher.
Gloriana habló en ese momento.
"¿Estás... bien?"
"Sí, estoy bien."
Luna no pudo creer la reacción de Asher. Es como si Asher estuviera acostumbrado a este tipo de situaciones. Por supuesto, Asher ya murió una vez, fue asesino toda su vida, estuvo en peligro en este nuevo mundo. Era algo normal su reacción, pero Luna no lo conocía del todo.
No solamente Luna estaba en shock, también lo estaba Gloriana, pero ella reaccionó más rápido que Luna.
Entonces se armó de valor y habló.
"¿Qué dices? Tu—tu mano tiene un agujero."
A pesar de haber hablado casi normal, por dentro ella estaba en un gran shock. Apenas pudo pronunciar esas palabras. No podía creer todo lo que estaba viendo.
Trató de controlar sus impulsos emocionales. No debía estar así de asustada.
Apenas podía reaccionar, pero eso no impedía sus pensamientos. Por supuesto, sus pensamientos estaban en un gran caos.
"Casi muero..." El pensamiento cruzó su mente en un instante.
"De verdad estuve cerca de morir." Su corazón latía tan fuerte y descontroladamente.
"No puedo creer que esté viva..." Una mezcla de alivio y miedo la envolvió.
El temblor en sus manos era prueba de lo cerca que había estado de morir hace unos segundos.
Por supuesto, sus pensamientos emocionales no terminaron ahí. Pero Luna sabía que lo que sucedió hace unos segundos ya pasó. Estuvo cerca de morir, pero está viva.
"Yo iré tras ellos." La voz de Encrid la sacó de sus pensamientos. Entonces, Encrid desapareció en un abrir y cerrar de ojos.
Luna estaba tan descontrolada.
Se sentía asfixiante, algo que nunca había sentido.
Pero afortunadamente, está viva.
Entonces, Luna miró a su mejor amigo, Gloriana. Ella, por supuesto, estaba en las mismas condiciones, pero no tan exageradamente como Luna.
"No se preocupen," la voz de Isabella resonó en la cabeza de Luna.
"Asher..."
"No te preocupes, curaré tu mano."
Rápidamente, Luna sintió un gran alivio tras ver a Asher curado. Pero aún así, estaba tan asustada. Cualquier persona se sentiría así en una situación como esta.
No es como si fuera algo normal, pero las reacciones del miedo son normales.
"¿Por qué..." pensó Luna.
"No debí haber salido del castillo," lo pensó muy detenidamente.
"Nada de esto hubiera pasado. Asher no... no sé hubiera lastimado."
Los sentimientos de Luna hacia Asher estaban siendo muy fuertes en este momento. Ella pensaba que era por culpa de Gloriana y de ella.
"Eso estaba apuntando a Gloriana y a mí."
Por supuesto, quien quiera que sea el asesino estaba apuntando a Gloriana y a Luna. Después de todo, ellas dos son muy importantes: una es la heredera al trono y la otra es de una de las diez grandes familias de magos más poderosos del continente.
Es normal que Luna piense en eso.
Entonces Asher habló, pero Luna se sorprendió por sus palabras.
"Las dos... no deberían de salir del castillo... Si mueren yo..."
Para Luna, esas palabras se sintieron algo diferentes. Es como si se dirigieran unos sentimientos únicos de parte de Asher, unos sentimientos que ella nunca creyó haber escuchado de parte del frío y sin emociones Asher. Fue algo que la dejó sin palabras. De eso Luna estaba segura. Después de todo, sus palabras tuvieron un significado.
Fue entonces que Isabella habló.
"Oye niño, pensé que no tenías sentimientos."
"Eh... ¿Qué...? Entonces eso fue lo que sentí." Me sorprendí al instante.
Luna no pudo creer eso.
"¿Tú... nunca has sentido algún sentimiento parecido al de ahora?"
Por supuesto, Luna quizás pudo suponer algo así, pero... Realmente Asher siempre ha sido así.
Entonces Isabella volvió a hablar.
"Es mejor que vayamos a un lugar más cerrado, aquí aún es peligroso."
Luna se tranquilizó más. Después de todo, no creía que estuviera en peligro si salía de este lugar y se iba a uno más seguro.
Entonces ella se levantó de su asiento. Sus piernas temblaban, pero aún así ella caminó hasta llegar a un lugar y detenerse.
Luna miró a Asher por unos momentos, pero su rostro estaba tan sorprendido que Luna no tuvo nada que decir.
Asher, por supuesto, la miró. Gloriana, que estaba a su lado, también miró a Asher de una manera sorprendida.
"¿Qué fue eso?" Luna se preguntó a sí misma.
Tras mirar el rostro de Asher, Luna se sintió un poco extraña. Era la primera vez que miraba a Asher así, asustado. De hecho, no sabía exactamente qué tipo de expresión era esa en su rostro.
Era diferente, como si hubiera visto algo que lo asustó por un momento. Rápidamente, Asher giró la cabeza.
"Lindo..."
"Lindo..."
Luna y Gloriana dijeron al mismo tiempo.
"..."
Luego se miraron las dos con la misma expresión. Las dos, por alguna razón, miraron la expresión de Asher de esa manera.
"Él... No, ¿qué demonios estoy diciendo?" Rápidamente, Luna se giró y siguió caminando.
Gloriana también la siguió, pero en el momento en que Luna se giró para ver a Gloriana...
"Tú... estás sonrojada."
Todo lo que sucedió hace unos minutos ya ni siquiera les estaba afectando. Más bien, por la expresión que Asher hizo, dejó a Luna y a Gloriana con unos pensamientos vergonzosos.
***
—Cambio de escena.
—Perspectiva de Gloriana Mengral.
"Lindo..."
"Lindo..."
En el momento en que Gloriana soltó esas palabras, lo hizo también Luna.
Entonces, Gloriana miró a su mejor amiga a su lado, quien también dijo las mismas palabras en el mismo segundo.
"Q—qué... fue eso."
Gloriana se sintió extrañada, pero... esas palabras que dijo no eran unas bromas para ella. Pero Luna también lo dijo.
Es como si las dos pensaran al mismo tiempo. La situación anterior, más bien, ya la olvidaron. Sus pensamientos ahora se centraron en Asher, simplemente por la expresión que Gloriana consideró linda. Fue suficiente para que ella dejara de lado lo que sucedió con la bala de maná.
"¿Por qué, por qué, por qué?" se repitió la misma palabra una y otra vez.
"Todavía... siento miedo," se dijo a sí misma.
Los pensamientos de Gloriana estaban entre miedo y por la expresión de Asher.
Era algo raro, dos tipos de pensamientos al mismo tiempo.
Por un lado, su muerte estuvo cerca; por el otro lado, ver a Asher así de repente fue un gran shock para Gloriana.
"No, debo concentrarme. Es mejor que siga a Isabella."
Gloriana se repitió la palabra, entonces dejó de lado todos sus pensamientos y empezó a seguir a Isabella por detrás. Luna hizo lo mismo que ella y entonces ambas siguieron a Isabella, no antes de mirar por un segundo a Asher, quien giró la cabeza al instante en que Gloriana lo miró.
"No... ¿Por qué... pero es lindo?"
Fue lo único que dijo antes de que Asher empezara a caminar de igual manera.
Simplemente Gloriana olvidó y dejó pasar lo de su casi muerte, pero aún así sentía miedo. Ella estuvo cerca de morir; sus piernas le temblaban y su respiración estaba descontrolada, su corazón también latía tan fuerte.
Ella estaba aliviada y al mismo tiempo tenía miedo, una reacción muy extraña.
***
—Cambio de escena.
—Perspectiva de Asher Frostblade.
¿Qué demonios era lo que sentía? Nuevas emociones, nuevos pensamientos que nunca había sentido.
Miedo y vergüenza, ¿qué demonios estaba sintiendo?
"Mierda..." Maldije en silencio.
No solamente estaba enojado, casi pierdo a dos personas allí y todo porque no soy lo suficientemente fuerte.
Afortunadamente, Encrid estaba en el momento, y él es muy fuerte. De eso sí estaba seguro. Pero si no hubiera puesto la mano, de nada hubiera servido mi ayuda, todo por un cuerpo débil.
Yo había prometido que nadie sería lastimado mientras esté cerca de mí. En vez de matar, me prometí cuidar a los demás, me prometí a mí mismo muchas cosas, pero aún así no las estoy cumpliendo.
"Mierda... No está bien, no hubo muerte, pero..." No terminé de pensar.
Rechiné los dientes y pensé.
"No sé quién fue, pero... Encrid lo buscará."
Por supuesto, Encrid desapareció para buscar al asesino en un instante. Solo debía esperar y averiguar quién es y por qué estaba en una misión de asesinato, quién le ordenó todo eso y también saber qué organización o grupo de asesinos estaba detrás.
Si quiero vivir en paz, debía encontrar a esos tipos y matarlos.
No quiero ver muertes ante mis ojos; me prometí no matar a personas inocentes y no ver una muerte no deseada frente a mis ojos.
Estaba enojado, no estaba muy bien de mis pensamientos, pero me controlé. Regresé a mi estado normal, el frío y sin emociones de siempre. Era la costumbre y quería quitar esa costumbre, pero es imposible. Solo las emociones de este cuerpo eran las que me ocasionaban estas extrañas reacciones cada momento.
Al principio era difícil de manejar nuevas emociones, pero me fui acostumbrando y las logré controlar.
"Debo seguir a los demás." Miré a las tres que se estaban alejando y entonces empecé a seguirlas.
"No hay nadie, parece que corrieron hacia abajo."
Es normal que las personas corran y busquen un lugar seguro cuando hay situaciones así como esta. Después de todo, hubo un intento de asesinato en este lugar.
"Pero ¿cómo demonios no lo podía sentir?"
Tenía la sensación de un asesino, pero eso no significa que sepa dónde está su paradero. Ni siquiera Encrid podía detectarlo, siendo un mago de octavo círculo, alguien muy fuerte y con unos sentidos muy bien desarrollados. Pero aún así, él no sintió la presencia del asesino ni su ubicación.
Es muy frustrante, pero... ya no se podía hacer nada.
Bajamos a la primera planta del edificio. Las personas estaban asustadas, bueno, es de esperarse esa reacción. La miraba todo el tiempo, tanto en las noticias como en persona en mi vida anterior. Estaba acostumbrado a esto.
La atmósfera, por otra parte, era espesa. Incluso el latido de corazón de las personas resonaba tan fuerte.
Por supuesto, los murmullos de las personas y la preocupación de otras también eran muy claros. Ignoré todo eso y simplemente seguí desde atrás a las chicas. Seguíamos caminando, entonces llegamos a una gran sala donde había mesas con muchos asientos. Gran parte de las personas estaban aquí, siendo un lugar muy cerrado de afuera, por lo que no es peligroso.
"Aunque ya no hay peligro."
Encrid se estaba encargando del asesino y ya no había necesidad de estar aquí, pero yo simplemente seguí a las tres.
Por supuesto, estaba Isabella. Aún no puedo ver su poder, pero creo saber que ella definitivamente no es débil. Quizás es igual de fuerte que Encrid, aunque también ese no podría ser el caso.
"Estemos aquí un momento, debemos de proteger a las personas por si hay un incidente."
Isabella habló; por su tono de voz parecía estar preocupada por las personas. Bueno, después de todo, todas las personas en este edificio eran personas comunes y corrientes que no pueden usar maná o no tienen fuerza como un caballero o alguien que entrena.
"Ya encontré al asesino. Sube a la última planta del edificio. Ahí estaré." Entonces la voz de Encrid hizo eco en mi cabeza.
"¿Cómo hizo...?" Me pregunté por un momento, pero lo dejé pasar. Entonces miré a Isabella y dije:
"Ya vuelvo, parece que Encrid ya lo encontró." Entonces Luna y Gloriana hablaron.
"Asher, afuera es peligroso."
"Así es, casi morimos hace un momento. Es mejor que no te alejes."
"Eh..." Me sorprendió la preocupación de las dos. Entonces respondí tratando de calmarlas.
"No está bien. El hombre que estaba con nosotros hace unos minutos me está esperando. Él es un mago de octavo círculo, así que no se preocupen."
"¿Octavo círculo...?" Luna y Gloriana hablaron al mismo tiempo.
Entonces, rápidamente me separé de ellas y subí a la última planta. Una vez que llegué ahí, exactamente a la azotea del edificio, vi a un hombre en el suelo con graves heridas, mientras Encrid estaba justo delante de él.
"Así que fuiste tú..." Entonces hablé, pero mi tono de voz fue severo y descontrolado. Estaba muy enojado en ese momento...