—¿Qué quieres decir? —preguntó Damon con suspicacia.
—Quiero decir que la mera idea de que te conviertas en su cuñado y el padre de sus futuros sobrinos y sobrinas le resultaba tan repulsiva que estaba dispuesto a arrojarse a las profundidades del infierno para evitar tal resultado —dijo Blaise sencillamente.
Antes de que Damon pudiera continuar interrogándolo, Blaise continuó con su informe —Ahora, algunas buenas noticias a pesar de nuestro coche que explotó.
—¿Hay buenas noticias? —preguntó Damon con acidez—. ¿Aparte del hecho de que tú y Harper sigan vivos y bien?
—¡Oh hombre de poca fe, claro que tenemos buenas noticias, gracias a Darach! —replicó Blaise con serenidad—. Él tiene una idea bastante buena sobre dónde podemos conseguir otro suministro de comida. Si todo sale como lo planeamos, Dahlia no será mi cuñada y tú podrás respirar tranquilo.
—¿Y le crees? —exigió Damon—. ¡Blaise no debería confiar en la gente tan fácilmente!