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Qin Yanran no sabía cómo había salido de la pradera.
—¿Estaba Wei Ting apoyando a esa chica?
—¿Por qué?
—Como miembro de la familia Qin, ¿no debería ser odiada por Wei Ting como Qin Yanran?
—No, ella era la nieta biológica de Qin Canglan. Wei Ting debería odiarla aún más.
Qin Yanran no podía entenderlo.
...
Todo el mundo volvió al aula para recoger sus libros.
Como se esperaba, Su Xiaoxiao empacó lentamente sus pertenencias y fue la última.
Cuando salió del palacio, solo quedaba un carruaje en la puerta, aparcado donde Su Mo normalmente lo hacía.
Cuando el cochero la vio, se apresuró a hacerle una reverencia y se volvió para conseguir un escabel.
—¿Eh? ¿Cambiaste el carruaje? —Su Xiaoxiao se acercó y se dio cuenta de que el cochero también había cambiado. Era una cara desconocida.
No lo pensó demasiado y subió al escabel para entrar en el carruaje.
Tan pronto como se sentó, alguien agarró su muñeca y la presionó contra la pared del carruaje.
