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—¿Qué está pasando? —Suena como la voz de Parker.
—Algo debe haber ocurrido. Vamos rápido a mirar.
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Los machos salieron corriendo de la aldea en grupo y vieron a Parker luchando contra un hombre bestia serpiente. Ese hombre bestia serpiente estaba sosteniendo a la hembra de Parker y había dejado al Parker de dos rayas completamente incapacitado para contraatacar.
¡Era sin duda una bestia salvaje!
Habían pasado muchos años desde que una bestia salvaje había visitado su aldea, pero todavía todos los hombres bestia sentían un profundo asco hacia estas bestias salvajes.
Al instante, los machos liberaron su furia, y los más de cien se transformaron completamente en sus formas animales, haciendo una serie de ruidos fuertes. Justo cuando estaban a punto de atacarlo, se congelaron en sus pasos al unísono cuando el hombre bestia serpiente los miró.
—¿Qué? ¿Es un hombre bestia con cuatro rayas de animal?
En la Ciudad de Hombres Bestia, solo había cinco hombres bestia con cuatro rayas de animal. ¡Cómo podía ser esta bestia salvaje uno de ellos!
El más formidable de entre ellos solo tenía una raya de animal, así que por supuesto, ¡no tenían el coraje de luchar contra un hombre bestia con cuatro franjas animales! Incluso si toda la tribu saliera a ayudar, quizás no serían capaces de ayudar a Parker a recuperar a su hembra. Pero era seguro que la tribu acabaría con muchas bajas y heridas.
Viendo que el grupo de bestias no lo atacaba, Curtis desvió su mirada. Su forma parcialmente transformada en animal se elevaba aún más mientras levantaba a Bai Qingqing del suelo.
Bai Qingqing se sintió desesperada al ver la vacilación de los machos de la tribu.
Lanzado al aire una vez más por la cola de serpiente, Parker se puso de pie tambaleante con sangre por todo su cuerpo. Miró hacia Bai Qingqing con sus ojos dorados inyectados en sangre, antes de emitir un gruñido y lanzarse hacia la serpiente otra vez.
Cuando las miradas de Bai Qingqing y Parker se encontraron, las lágrimas de Bai Qingqing cayeron al instante. Gritó en su corazón, "¡Déjame en paz!"
Sin embargo, en esa circunstancia, no podía pronunciar ni una sola palabra.
Curtis era una serpiente perezosa a la que le gustaba ir con la corriente y no le gustaba complicar las cosas. Ahora que más de cien hombres bestia habían venido, quería terminarlo lo más rápido posible.
Esta vez su cola no lanzó a Parker al aire de nuevo, sino que se enrolló y se desplazó ligeramente hacia atrás, antes de barrer con fuerza, enrollando alrededor el leopardo que había saltado al aire.
El leopardo soltó un rugido mientras su blanda cintura era fuertemente rodeada, continuamente vomitando sangre fresca de su boca. Entre el apretar de la cola de la serpiente, se podía oír indistintamente el sonido de la fricción de los huesos.
—¡Suéltalo rápido! —Bai Qingqing se apresuró a mirar hacia el rostro del hombre bestia serpiente.
Curtis bajó la cabeza y miró a Bai Qingqing, con la mirada tan serena como siempre. Claramente, el ataque de Parker no significaba nada en sus ojos.
—¡Suéltalo, te lo ruego! —Bai Qingqing miró frenéticamente a Parker, sintiéndose más ansiosa ahora.
Los ojos de Bai Qingqing se llenaron de lágrimas, y sus ojos ligeramente bajos la hacían parecer lamentable e inocente—incluso las pecas negras por toda su cara no ocultaban su atractivo.
—Está bien. —Curtis besó suavemente el ojo de Bai Qingqing y le limpió las lágrimas. La soltó y dijo suavemente.
La serpiente entonces movió su cola, lanzando al leopardo lejos en la distancia.
—Hush, hush —Curtis zarandeó a Bai Qingqing en sus brazos, pero todo lo que consiguió fue que ella eructara después de tanto llorar. Su guapo y extraordinario rostro no pudo evitar revelar una leve sonrisa.
Los hombres bestia serpiente eran en realidad muy guapos. Pero no importa cuán atractivos fueran, Bai Qingqing no sería capaz de notarlo en esas circunstancias.
Curtis torció su cuerpo y se dio la vuelta. Su gran cuerpo no lo hacía torpe. Por el contrario, incluso era más ágil que una pequeña serpiente. Torció a voluntad su cuerpo de serpiente y se deslizó fácilmente casi diez metros hacia adelante.
Escuchando los rugidos incesantes de Parker desde atrás, Bai Qingqing miró por encima del hombro de Curtis.
Los machos de la tribu intentaron detener a Parker, pero Parker astutamente esquivó a las bestias machos y los persiguió rápidamente.
No obstante, ya que incluso el gravemente herido él era más rápido que las bestias que tenían una raya menos que él, ¿cómo iba a poder alcanzar a Curtis que tenía dos rayas más que él?
Bai Qingqing miró fijamente al Parker corriendo como un maníaco en un estado aturdido, hasta que su figura se hizo más y más lejana, más y más pequeña, hasta que finalmente, desapareció de la vista...