—¿Y si no tiene fuerza de fertilidad? —había sido examinada y la piedra de la mujer no había reaccionado en absoluto.
—¿Una mujer sin fuerza de fertilidad? —el jefe parecía sorprendido también, porque se suponía que todas las mujeres tenían fuerza de fertilidad, siendo la única diferencia el grado de esta.
Sally asintió —¿la academia aún la aceptaría?
El jefe se rió —hay una nueva regla para la inscripción de este año, las solicitantes femeninas a la Academia de la Bestia Divina se evalúan en base a dos criterios, uno es la fuerza de fertilidad y el otro es el talento. Así que, si una no tiene fuerza de fertilidad o está por debajo del nivel medio-alto, pero aún desea entrar a la Academia de la Bestia Divina, todo dependerá de su talento.
—Bien, gracias, jefe —Sally tomó su bebida y se fue. Parecía que el Emperador de las Bestias había cambiado las regulaciones para la pequeña princesa.
El jefe respondió con entusiasmo —vuelve por más bebidas.
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