Las acciones de la Serpiente Flor fueron totalmente naturales, sin traicionar señal alguna de premeditación.
Según el plan original, una vez el vino tinto se derramara sobre la cabeza de Julio Reed, un conflicto sería inevitable.
Los pocos subordinados de la Serpiente Flor estaban justo detrás de él, listos para actuar en caso de un conflicto.
En ese momento, Radley Ridge intervendría como mediador, exigiendo a Julio Reed inclinarse y disculparse.
El guion estaba escrito a la perfección, asegurando no solo la humillación de Julio Reed sino también una oportunidad para que la Serpiente Flor demostrara su fuerza a Quella Radcliffe.
Sin embargo, en el mismo instante en que la copa de vino salió de su mano, ¡Julio Reed, quien parecía casi en coma por la borrachera, de repente abrió los ojos! Se movió ligeramente, ¡su mano derecha salió disparada!
¡La copa de vino tinto, a meros centímetros de su cabeza, ahora estaba firmemente atrapada en la mano de Julio Reed!