—Recomendación musical: Aurora, 'Fugitivo'.
—Mientras la gente bailaba y festejaba en la noche, un par de ojos carmesíes vagaban perezosamente entre la multitud hasta caer sobre la diminuta figura de pie justo en la entrada del gran salón. Podía oír sus latidos inestables mientras ella permanecía allí, él se rió entre dientes.
—Resulta que la pequeña oveja estaba muerta de miedo. Sus delgados deditos se aferraban fuertemente a la bandeja cuando fue llamada por un hombre.
—Sus ojos la seguían tranquilamente mientras empezaba a caminar para servir al hombre.
—Había estado observándola durante bastante tiempo, ya que parecía ser lo único divertido en su palacio.
—La primera persona que le había hecho curvar los labios en décadas.
—Cuando decían que el príncipe estaba dormido... Bueno, eso es lo que les hizo creer mientras él hibernaba durante siglos después de aburrirse de la vida. La vida le parecía tan sin sentido, especialmente para su ser maldito.