Punto de vista de Selene
—Eso fue intenso —le susurré a Noé en cuanto el salón se vació y solo quedamos nosotros con el Gran Licano y Nora que seguía ahí. Desde la esquina de mis ojos, vi al Gran Licano acercándose a nosotros. Tenía una sonrisa agradable en su rostro.
—Su Majestad —lo saludé con una sonrisa.
—¡Luna! —asintió y se volvió hacia Noé—. Gracias por cederme la palabra allí, se sintió muy refrescante.
—Aun así, Papá, no deberías haber ido tan lejos y despedirlo. Solo estaba cuidando a su padre. Él es uno de los mejores que tenemos en la manada y tendré que volver a traerlo. Deberías entender que hacer esto podría hacer que la gente nos rechace, especialmente a él. Él es el favorito del pueblo.
