Atención, este capítulo posee, ultra violencia muy extrema, por lo que se le recomienda una gran discreción a la hora de leer este material, ya que esto posee, erogore (Sexo con violencia extrema), violencia infantil, violencia animal. Se le advirtió desde ahora para que no venga a reportar este capítulo.
Una vez que Adam fue atendido por el doctor y sus curanderos, este se encuentra en cama durmiendo profundamente, la duquesa y Arwen estaban orando por su mejoría al lado de él, el pueblo de Seras, entre otros extranjeros están esperando a que Adam despierte, pero lo que no sabían la razón por la cual, él no se despierta. Adam está teniendo una conversación muy acalorada con la señora Xenovia, sobre su victoria.
—EN TU CARA, MALDITA PERRA, NO HAY NADA QUE PUEDE DETENERME. —Grito Adam mientras se ríe diabólicamente atado a unas cadenas.
—ES IMPOSIBLE, INCLUSO CON LA INFLUENCIA DE MULITOR, EL HOMBRE AL CUAL ENCARNAS, NO DEBERIAS SEGUIR VIVO, COMO RAYOS LO LOGRASTE, ACASO HICISTE TRAMPA. —Grito Xenovia llena de ira y a punto de arrancarse los cabellos de la frustración.
—Trampa, como rayos alguien como yo puede hacer trampa, yo solo sigo tus miserables reglas, me imagino que tú también tienes las tuyas, cierto, por lo tanto, la única que hace trampa aquí eres tú Xenovia, sin embargo, por más que me hagas sufrir, todos esos días siendo violando, torturado y humillado, todo ese infierno que he pasado tendrá su consecuencia, mientras tenga aliados a mi favor, estaré más cerca de cumplir mi objetivo y es hacerte mía, Xenovia, voy a disfrutar como te destruyo física y mentalmente hasta convertirte en un pedazo de carne que cuyo propósito en esta miserable eternidad, será complacerme en mis más bajos instintos. —Dijo Adam mientras comenzaba a romper las cadenas que lo sometían.
—Aun así, te falta un largo camino por recorrer, Adam...—Contesto Xenovia mientras mira con horror como Adam termina de romper sus cadenas.
—Puedes mandarme un ejército de todo tipo, dragones, demonios, hasta Dioses y nadie...NADIE... ME DETENDRA. —Respondió Adam que rompe sus cadenas y se abalanza contra la diosa, pero se despierta de golpe encima de Arwen.
—Adam, estas bien, estabas diciendo cosas extrañas y luego te abalanzaste sobre mí. —Contesto Arwen.
—Arwen, mi amor, cariño, te quiero mucho, me alegra que estés bien. —Exclamo Adam mientras abraza muy fuerte moviéndola de un lado al otro y dándole muchos besos de amor.
—Mi héroe, Adam Anderson, acaso no le va a dar todo su cariño y amor a su majestad. —Dijo Malory.
—Venga, para acá, su majestad, que no me olvide de usted. —Contesto Adam que suelta a Arwen, pero cuando él la iba abrazar con la misma intensidad con la que abrazo a Arwen, pero su majestad le hace una seña de alto, esto deja extrañado a Adam, pero es ella la que se la abalanza, lo abraza y lo llena de besos.
Arwen se les unen y se ponen a bailar de felicidad, pero Miriel no quería unirse estaba con los brazos cruzado, con una cara de pocos amigos.
—Ven Miriel, a celebrar con nosotros, Adam, el héroe del reino de Seras ha despertado después de salvarnos del campeón del infierno. —Dijo Malory.
—Lo lamento, su majestad, pero con el debido respeto me tendré que negar, si bien lord Adam derroto a una amenaza que solo el héroe podía hacerlo, sin embargo, sigo pensando que la presencia de Adam solo le traerá la ruina a nuestro reino. —Contesto Miriel.
—Interesante, Miriel, se nota que ser la esclava de los Kulus durante mucho tiempo hizo que tu corazón más duro que una piedra, pero Adam es diferente, así que te ordeno o te corto la cabeza, yo misma. —Respondió Malory, pero Adam se arrodilla para pedir misericordia postrando su rosto en el piso.
—Perdone mi intromisión, su majestad, sé que tiene que corregir a sus súbditos, pero no cree que hay destinos peores que la muerte, es necesario quitarle la vida a alguien solo porque tenga una opinión diferente a usted, no es mejor quitarles la vida a las amenazas latentes de su reino. —Refuto Adam.
—Tu misericordia se compara con el de la diosa Xenovia, Adam, nunca he visto tanta pureza en hombre como tú, pero aun así se merece un castigo por su falta de respeto. —Contesto Malory mientras le da una abofeteada a Miriel que la tumba al piso, ella piensa un momento sobre de que tipo de castigo le podía hacer a Miriel hasta que se le ocurrió una malévola idea y añadió, pero cambiando el tono a uno muy amenazante. —Miriel, te ordeno que le hagas la mejor felación que has hecho en tu vida a Adam, al fin de cuentas no es muy diferente, a las que le hacías, a mis súbditos, a mis soldados, a los Kulus que te violaban una y otra vez día tras día...e incluso... a mi esposo.
Adam y Arwen estaban muy asustados en ese momento, además de que Miriel está muy aterrada ya que prefería mejor que la mataran, antes de hacer ese tipo de cosas con él, sobre todo cuando la duquesa está mostrando su lado oscuro frente a ellos.
—Crees que no lo sabía maldita zorra...—Susurro Malory de forma amenazante para luego dar órdenes con altura y rabia. —ahora, Adam siéntate en esa silla, bájate los pantalones y tu Miriel, empieza... AHORA.
Adam esta aterrado en ese momento, pero hizo lo que dijo la duquesa, se sentó en una silla, se bajó los pantalones mostrando su grueso y viril miembro, Miriel se sienta en cuclillas en enfrente del su imponente miembro, sin embargo, la pobre se queda petrificada y temerosa ante él, debido a que ve pasar por sus ojos, su vida como esclava sexual de los Kulus, ver como ella era violada por todos los orificios que una mujer podía tener, así como los orificios que ellos mismos le infligían a ella, como le abrían el vientre para luego violar sus intestinos, no obstante al mismo tiempo ellos violan sus pechos tomando un cuchillo para expandir su pezón con el fin de que sus miembro puedan entrar dentro del, también de como violaban sus ojos, etc.
—Lo siento, su majestad, pero prefiero la muerte, antes de succionar esa monstruosidad. —Dijo Miriel casi llorando y temblorosa.
—Ósea que prefieres la muerte, antes de succionarle el miembro a Adam, pero que falta de respeto al duque...el duque te salvo de la cloaca de donde estabas, donde eras peor que un pedazo de carne nauseabundo que era violada todos los días de las peores forma posibles por parte de los Kulus, para que al final se hartaran de ti, te vendieran a unos esclavistas para ser el juguete sexual de los peores nobles que los reinos del continente pudo ver y un acto de misericordia del duque Charles, te salvo de ese infierno y ahora le estas faltando el respeto a ese acto, pero no te preocupes, Miriel, yo te ayudare. —Contesto Malory, mientras la agarra del cabello, ella grita y le hace succionar a las malas el miembro de Adam.
Primero, hizo que todo el miembro entrara dentro de su boca hasta su garganta, presionando con fuerza.
—Si, lo muerdes, te mandare a lo más profundo de un bosque para que las bestias te coman y te violen, así que pórtate bien. —Susurro Malory en el oído de la pobre Miriel, que está llorando.
La duquesa mueve su cabeza, brutalmente para que se la succione, el pobre de Adam, no quería disfrutarlo, pero aun así lo hace, ya que quiera terminar con eso de una vez por todas, pero le costaba venirse, así que se imaginó que era Arwen para venirse más rápido.
—Estoy por venirme su majestad, por si le interesa. —Dijo Adam.
—Qué bueno Adam, no te contengas en lo absoluto. —Exclamo Malory mientras sigue moviendo la cabeza de Miriel, hasta que ella aumenta la velocidad, para que Adam se venga más rápido.
—ME VENNGGOO. —Grito Adam mientras por instinto agarra la cabeza de Miriel en toda la boca, para venirse en su cuello.
—Que no caiga ni una sola gota, en el piso Miriel, si no quieres volver a sentir mi ira de nuevo. —Exclamo Malory.
Miriel se traga todo su semen sin dejar caer ninguna gota en el piso. La pobre postra su rostro en el piso.
—Mis más sinceras disculpas, lord Adam, por faltarle el respeto al héroe del reino de Seras. —Dijo Miriel mientras se disculpa, pero cuando levanta la cabeza levemente, lo mira con una mirada asesina que provoca que al pobre de Adam se trague su propia saliva y se le eriza la piel.
—Listo, ya puse en su sitio a Miriel, así que tenemos asuntos pendientes que hablar contigo, Lord Adam...pero primero quiero que salgas al balcón para que saludes a mi pueblo, si escuchas con atención, pues escuchar a la multitud, así que podrías hacerme un favor y saludarlos, por favor. —Dijo Malory pero el estómago de Adam ruge como un león y añadió. —Aunque primero debe desayunarse para estar en condiciones debido a que tengo algo muy especial preparado para usted, así que, Arwen, quiero que lord Adam este bien vestido y alimentando, ya que tengo varias actividades que tengo planeadas para él.
Arwen toma de las manos a Adam, lo lleva a bañarse en la tina del cuarto de Adam, pero cuando Adam se entra en la tina para Arwen lo bañe por órdenes de Malory, sin embargo, ella se quita la ropa y se entra con él en la tina.
—Arwen...—Exclamo Adam nervioso, trata de desviar la cara, pero pone su mano delicadamente en su barbilla dirige su mirada hacia ella.
—Ya me has visto desnuda, porque no me miras con esos ojos tan hermosos. —Pregunto Arwen mientras el pobre de Adam no puede evitar mirar su hermoso cuerpo, ella toma la mano de él y la pone en uno de sus senos, por instinto Adam aprieta, ella comienza a gemir, se le abalanza, esto levanta un poco toma su miembro, pone encima de su vagina, se deja caer para que el miembro la penetre y comienza a cabalgar encima del, pero...
—Sabes me sorprende que tomes la iniciativa, después de lo que la reina le hizo Miriel...que acaso ella no te importa. —Dijo Adam matando el momento, este comentario hace que ella se detiene un momento.
—Se... lo que le paso a Miriel, se de las atrocidades que los Kulus le han hecho a ella, yo también los odiaba, pero cuando te vi, lleno de sangre, malherido, al principio tenía mucho miedo, pero cuando dijiste, no tengan miedo, ya están a salvo y te desplomaste en el piso, pude presenciar como la diosa Xenovia tuvo piedad de nosotras... sin embargo, eso no termino ahí, tu diste tu vida por los caballeros, por el pueblo de Seras, te enfrentaste a un ejército tu solo y derrotaste al Campeón del infierno, con pura fuerza bruta, aunque estabas bien preparado para la batalla, tu fuerza, habilidad, resistencia y astucia fueron la que determinaron tu victoria, tú eres un auténtico héroe, Adam, aunque Miriel sea mi mejor amiga por mucho tiempo, estoy en total desacuerdo con ella, no le augurio lo peor, pero no le tolerare su falta de respeto ante ti.—Contesto Arwen llena de lágrimas y abrazando a Adam.
—Muchas gracias, Arwen, no sabes lo mucho que te aprecio, la duquesa y tú, son las personas que más aprecio en esta vida, porque reconocen lo importante que soy para el reino de Seras, esas hermosas palabras eclipsan todo el infierno que he pasado en esta miserable existencia, quisiera quedarme aquí, pero... (se queda pensativo unos segundos)—Respondió Adam y añadió. —Tengo que derrotar al Rey demonio, es mi destino.
—Una pregunta Adam, y en ese destino, estoy yo cierto...cierto. —Dijo Arwen mirándola directamente a los ojos.
—Lamentablemente...no, si te soy sincero, no he pensado algo más allá que eso, ya que lo más probable es que muera en el intento, además mi mera existencia pone tu vida y la de los demás en riesgo, no sé cómo explicarlo, pero estoy condenado a que las personas más importantes de mi vida mueran de una forma horrible y despiadada así que cuando obtenga mi libertad, encontrare la forma para ir al infierno y de terminar lo que he empezado. —Contesto Adam.
—Qué triste es tu vida, Adam...—Respondió Arwen.
Adam, no puede mirarla a los ojos, esta apunto de llorar, pero ella en un acto de compasión, abraza su cabeza, esto lo tranquiliza.
—Entonces, vamos a disfrutar el poco tiempo que tenemos juntos, voy a darte los mejores recuerdos de tu vida, te voy a extrañar mucho, Adam. —Contesto Arwen mientras se pone triste.
—Tal vez, no tengamos tiempo para tener una relación decente, pero tú siempre tendrás un espacio en mi corazón. —Respondió Adam.
Después de esto, ambos terminan de bañarse, ella lo prepara para que pueda recibir al pueblo de Seras en el balcón del castillo, Adam se siente nervioso, pero la Reina lo acompaña, sin embargo, el pobre súbitamente comienza a recordar cómo la gente aborrecía, lo humillaba y veía por su aspecto durante sus treinta años de esclavitud, esto lo hace sentir mal ya que tiene miedo de cómo la gente reaccionaria al verlo.
—Creo que prefiero darme a conocer con mi armadura puesta, el mundo no está preparado para verme como soy, su majestad. —Dijo Adam muy nervioso, temblando y lleno de pavor.
—Pero mi héroe, mi pueblo lo aceptara por la buenas... o por las malas. —Contesto la reina resaltando la última parte de forma amenazante.
—Gracias, por defenderme su majestad, pero...—Respondió Adam mientras se postra con su rostro besando en el piso y añadió de forma asustada. —Por favor acepte mi suplica, se lo ruego.
La duquesa en un acto de misericordia lo abraza, Arwen quiere hacerlo y ella se lo permite.
—Está bien, mi héroe, te lo permito, pero tarde o temprano tendrás que enfrentar la realidad y mostrarte tal y como eres al mundo. —Comento Malory.
Ella les ordena a sus sirvientes traer su armadura ya reconstruida para que se la ponga, se presente ante la multitud expectante por él, así que se pone su armadura, la duquesa sale primero da un discurso que dura entre dos a cuatro minutos y presenta Adam que sale al balcón, una vez ahí, una multitud lo inunda con una colosal ovación, en ese momento Adam se siente como si fuera ascendido al cielo.
—Que es este sentimiento tan embriagador, es mejor que cualquier droga que me he probado o me han hecho probar, necesito más...MAS—Pensó Adam con el ego inflado hasta la nubes y alzo su puño, la ovación aumento más su fuerza y añadió en mente. —Se siente bien tener al mundo al mundo en mi mano.
La duquesa le pregunta si quiere dar unas palabras, pero él se niega ya que no es necesario, debido a que para él las acciones valen más que las palabras, así que vuelven y entran al cuarto.
—Mi héroe, hoy tienes muchas actividades que hacer con el pueblo, pero antes tenemos que hablar algunas cosas antes de que empecemos con las actividades, así que pasemos al sótano, Arwen te guiara. —Dijo Malory.
—El sótano... y para que su majestad. —Exclamo Adam ya que estaba muy nervioso ya que estaba recordado todos los actos abominables que había pasado en el sótano de sus dueños le habían hecho durante muchos años.
—No te asustes, mi héroe, vamos a quitarte el sello, además de hablar de otras cosas. —Dijo Malory tratando de tranquilizarlo.
—AHHHH, entiendo, disculpe, es que es la costumbre. —Contesto Adam que se calma un poco.
—No, ya no es la costumbre, ahora eres un hombre libre, mi héroe, ven y sígueme que tu libertad me espera. —Respondió Malory que le toma de los hombros para que él entre en confianza consigo mismo.
La duquesa le ordena a Arwen que valla con Adam para retirarle la armadura y ponerle una vestimenta informal en la habitación de él, una vez vestido como tal se reúnen con la duquesa, Miriel y los guardias. Ellos se van al sótano, donde había un comerciante esclavista que se iba a encargar de retirarle el sello mágico, Adam se sienta en una silla donde hay un sello mágico, para empezar con el rito de liberación, el comerciante comienza a recitar el hechizo de liberación, al principio el sello se resististe, pero luego se rompe, liberando a Adam por completo. La duquesa y Arwen abrazan a Adam, el comerciante le da su nuevo contrato de libertad, él está muy feliz y contento, después de terminar con el rito, se va con la duquesa a caminar por el jardín al estilo de juego de tronos, por lo que eventualmente comienzan a charlar.
—Así que mi héroe, que vas a hacer después del festival, vas a ir a derrotar al rey demonio, a pesar de que ya tenemos a un héroe elegido por la reina, si quieres puedes quedarte aquí y ser nuestro héroe. —Comento Malory.
—Sería un honor para mí su majestad, pero no puedo quedarme, a diferencia de su héroe que fue bendecido por la Diosa, yo soy todo lo contrario, si bien dure treinta años como un esclavo, el infierno pagará muy caro por exterminar a mi familia y todo lo que amo, así iré yo mismo al infierno para matar al rey demonio tantas veces que la diosa Xenovia tendrá pesadillas por toda la eternidad. —Contesto Adam y pensó. —Aunque realmente yo solo quiero metérselo a la Diosa, pero no le voy a decir una estupidez así, mejor que se quede con lo que le acabo de decir... aun así, si soy sincero conmigo mismo, quiero hacerle pagar caro por todo lo que me ha hecho y me va a hacer en los otros mundos que viaje porque esto es la punta de iceberg.
—Eso es lo que me gusta de ti, eres un hombre decido y responsable de tus actos, pero como iras al infierno para eso tendrás que hacer un pacto con un demonio...—Respondió Malory.
—Nada de pactos, o cualquier cosa que pueda volverme esclavo, yo soy un hombre libre y me mantendré así hasta el final. —Exclamo Adam y pensó. -Y más que los demonios soy unos malditos tigueres, esos desgraciados.
—Me encanta tu amor por la libertad, pero eso no va a hacer suficiente para ir al infierno a derrotar al rey demonio, a no ser...—Respondió Malory que comienza a pensar y añadió sonrojada y confiada en lo que dice. —Hay una forma para ir al infierno, sin ritos satánicos, ni pactos, ni nada que te obligue a vender tu alma...
—Dígamelo, por favor, se lo ruego, le hago diez hijos si quiere, pero por favor, Dígamelo. —Respondió Adam mientras que súbitamente le abraza su pierna y le ruega que le diga, si hay una forma de ir al infierno.
—No soy digna, de engendrar a sus hijos...—Exclamo Malory que esta avergonzada, orgullosa al punto de que quedo traumada y añadió. —Además, estoy casada. —Susurro sonrojada y luego vuelve en sí y continua. —La forma de poder ir al infierno es mediante un Hell Dealer. —
Nota: Si pitbull, me jode con este chiste, lo voy a eliminar, así que pueden saltárselo si quiere.
—watagatapitusberry.—Dijo Adam.
—Que. —Contesto Malory.
—watagatapitusberry. —Respondió Adam.
—Que significa watagatapitusberry. —Pregunto Malory.
—Ni yo tampoco sé lo que significa su majestad, solo está molestándola un poco. —Exclamo Adam mientras se ríe un poco, ella también se ríe, hasta ambos se tranquilizan.
—Sabes, mi héroe, me vas a hacer mucha falta, el poco tiempo que hemos pasado juntos, para mí, es como si te conociera de toda la vida. Tal vez en otra vida, si hubieras nacido en mis dominios, la cosa hubiera sido diferente. —Comento Malory, Adam la suelta, se levanta para verla cara a cara con el fin de prestarle atención.
—Si...quizás....su majestad. —Susurro Adam y pensó. —Quizás, no hubiese sido muy diferente con la familia Cunningham o tal vez hubiera sido como estamos ahora, pero si las circunstancias se dieron de esta forma, que así sea.
—Pero nada, sigo con la explicación, la razón por la cual pudimos entregarte la armadura a tiempo, es porque nos encontramos con un Hell Dealer, comerciantes provenientes del infierno que hacen trueques con los humanos a cambio de materia prima entre otras cosas con los habitantes del Maelstrom, el reino de los demonios, claro está, ellos tienen sus reglas, pero afortunadamente no se necesita de un pacto o algo por el estilo ya que a los demonios del Maelstrom les gustan las cosas de la tierra, por lo trueques con ellos son seguros, mientras no rompan su código y ambas partes queden satisfechas.—Explico Malory.
—Aunque...bueno, yo sé que las armas, se las facilitaron, los herreros y la iglesia los bendijo, pero una armadura de escamas de dragón no es algo, que nos beneficia a nosotros...digo yo. —Contesto Adam con duda y extrañado.
—Si, a mí también me pareció raro, ya que los trueques de los Hell Dealers, no buscan hacer que ninguna de las partes quede afectadas, además las armaduras de Dragón son muy raras ya que los Dragones son muy difíciles de matar en combate, ya que son muy inteligentes, además de que son muy incomodas de hacer debido a que las escamas son casi indestructibles, así como que no aguantan combates de larga duración, por el tema de la diferencia de materiales, me imagino que por eso me la vendieron, quizás ellos te puedan ayudar a ir al infierno, solo si llevas evidencia de que lo derrotaste, ya después de ahí no sé cómo te las arreglaras allá pero si tuvieras la oportunidad de pasarte a su lado, reclamar el título de campeón tras la derrota de Asmodeus a manos tuya, ganarte su confianza, para luego apuñalearlos por la espalda, acabar con el rey demonio y el infierno mismo de un solo golpe, yo creo que eso es algo que yo haría, no lo crees, mi héroe.—Comento Malory rematando con ese último comentario de forma malévola y malvada.
—Increíble, su Majestad, ni judas haría una traición de esa magnitud, me gusta, cuando termine con las actividades del pueblo de Seras, buscare al Hell Dealer para que me lleve al infierno y ejecutare su plan diabólico... aunque no se si lo logre. —Contesto Adam.
—Claro que lo lograras, Adam, sabes cómo te llaman mis soldados...te llaman el Dark Stabber o para que entiendas mejor el apuñalador oscuro, debido a que cuando verificaron el cuello del campeón del infierno, ellos se horrorizaron cuando descubrieron que Asmodeus fue decapitado a base de varias apuñaladas, una forma tan barbárica y primitiva, que cuando yo lo vi quede horrorizada de forma en como fue degollado pese a que estoy acostumbrada de ver o de presenciar ejecuciones horribles y viscerales, pero nada, mi héroe, ve a disfrutar con Arwen, el festival que hice en tu nombre.—Respondió Malory.
—En serio, a eso se refería con actividades, me siento halagado su majestad, nadie había hecho eso por mi...nadie. —Contesto Adam sintiéndose bien, querido y amado, por un momento sintió paz, la reina se abalanza para abrazarlo.
—Lo hice solo para ti, mi héroe, es hora de que recuperes la humanidad que se te fue arrebatada, antes de que comiences tu odisea. —Respondió Malory, mientras lo abrazaba.
—Humanidad...con que se come eso, pero ni siquiera en mi propio en mundo, me importaba una mierda la gente, ni siquiera al trapo de familia que tenía, a las únicas personas que yo consideraba una familia, era a Manolo y su familia, ahora sabrá Dios que será de ese pobre diablo...ojala, que este bien, me hace falta.—Pensó Adam mientras recordaba su mundo y siguió pensando.—Al menos aquí me tratan como a un rey... por ahora, ya que la perra de Xenovia, de seguro esta maquinando una vaina psicópata, como la mierda que paso en la maldita mansión esa, por cada mierda que esa perra me haga pasar, se la voy a devolver por mil, por eso tengo que irme de aquí lo más rápido posible antes de ella comience con su mierda.
Ambos siguen conversando de acerca del festival, hasta que aparece Arwen con una vestimenta informal de ese tiempo, la duquesa los deja solos ya que tiene cosas importantes que hacer, cuando ella se retira con sus guardias. Arwen mira a los lados, le entrega una especie de pomada mágica para que se recubra la cara con el fin de que pueda ocultarse y evitar ser reconocido, para que pueda disfrutar del festival en paz, también ella se lo pone por lo que se dirigen a la ciudad. A Adam le pareció extraño que Arwen se ponga la pomada, pero recordó a Edriel que era un elfo por lo que de seguro en el reino de Seras, no hay elfos y si los hay son esclavos o están juntos con los nobles.
Ellos van a la ciudad donde hay varios estands de comida a comer la comida chatarra de la época, así como varias actividades del festival, si bien Adam está feliz, había ocasiones donde algunos plebeyos hablan mal de la Duquesa y hasta incluso del propio héroe que salvo a la ciudad en las montañas, debido a que se extendió que el héroe que los salvo era un Kulu sobreviviente. Esto perturbaba a Adam, por lo que a manera de causalidad se metía en las conversaciones para saber más de la Duquesa, Arwen no quiera que lo hiciera, pero no podía, detenerlo, a partir de estas conversaciones, él se dio cuenta de que salvar a la duquesa fue un error, ya que desde que se casó con el duque de Seras, los impuestos habían subido, había mucha represión militar, entre otros actos que se podrían considerar autoritarios. Sin embargo, aun así, para él, era su majestad, era la única persona que en el poco tiempo que tuvo con ella, le dio el amor y cariño que nunca se había dado durante esos treinta largos años de esclavitud que vivió, por lo que, no podía permitir que hablaran mal de ella, pero Arwen, lo impidió varias veces, hasta que las conversaciones que hablaban mal de él decían que el campeón del infierno vino a reclamar su alma después de la derrota de los Kulus a manos del infierno así como que la duquesa era una bruja, etc. Él no lo podía soportar más, se fue de ahí, aunque... había personas de la ciudad de la montaña que lo defendían, esto reavivo su humanidad, un poco, pero lo que le elevo más su autoestima sobre todo una niña que vio las grandes proezas de Adam que les cuenta a unos niños que están ahí.
Ellos vuelven al castillo para preparase para la fiesta que la duquesa tenía con los nobles del castillo, Adam está muy pensativo en su cuarto acostado en la cama con las manos en la nuca con respecto a la Duquesa, aun así, no desconfiaba de ella.
—Este maldito mundo de mierda, no me va a dejar estar tranquilo, ni por solo cinco segundos, afortunadamente, los habitantes de la ciudad de la montaña me ven como un Dios, sin embargo, la gente de mierda de Seras son tan mierda que si la duquesa me da la orden de aniquilarlos, no lo dudaría por tan solo cinco segundos, eso me acordó a la vez que derrote a ese dragón, los malditos de la mansión no me lo agradecieron en lo más mínimo, al contrario me castigaron, a mí y Eldar debido a que él me dio la punta de una flecha mata dragones para convertirla en lanza, lo malditos no sabían que los dragones tiene una agilidad del carajo, atinarle a esa cosa, fue un infierno, si no fuera por el Sky breaker, mi alma seria devorada por esos baca del vacío.—Pensó Adam.
Mulitor interrumpe sus pensamientos y comienzan a dialogar.
—Los débiles son unos malagradecidos, Adam, por eso este mundo debe de perecer en nuestras manos. —Dijo Mulitor en su mente.
—Tal vez lo sean, pero mientras haya gente buena dentro de ellos, vale la pena salvarlas. —Respondió Adam.
—Tu solo desperdicias tu potencial, evitando lo inevitable, por más buenas personas que sean, son humanos, tarde o temprano, te apuñalarán por la espalda o verán el monstruo que eres, nosotros somos una bestia imparable, sedienta de sangre, no te dejes amedrentar por las opiniones de los demás, tú eres un Dios...—Contesto Mulitor.
—Yo no soy un Dios, ni me interesa serlo, yo, ayudo al que se me da la gana, porque alguien me enseñó a ser bueno sin mirar a quien, aunque habrá algunos que se aprovecharan de mi buena voluntad, así como de engañarme o traicionarme, yo le hare un gran favor a la humanidad de erradicarlos, y si la propia humanidad me da la espalda, yo seré su verdugo. —Respondió Adam.
—Eso me gusta, Adam, eso me gusta. —Contesto Mulitor.
—Además, Mulitor, tú eres violencia pura y yo soy locura pura, debemos permanecer unidos si queremos cumplir nuestro cometido ya que nosotros somos el apuñalador oscuro. —Respondió Adam, Mulitor lo acepta.
Alguien toca la puerta, Adam pregunta quien es.
—Soy yo Arwen, puedo pasar. —Pregunto Arwen.
—Este cuarto es todo tuyo, puedes pasar cuando quieras sin necesidad de tocar. —Respondió Adam.
Arwen entra vestida de gala, con Miriel que trae, una mochila con su armadura, el cuerno de Asmodeus, algunas armas para su viaje, ella se lo pone al lado de él.
—Muchas gracias, Lord Adam, pero eso es cortesía ya que usted puede estar muy ocupado haciendo algo o con alguien. —Dijo Arwen mientras le guiña un ojo, Adam esta confundido en ese momento.
—Listo, lord Adam, ahí está su armadura, el cuerno del campeón, papeles para poder pasar por los poblados, sus papeles de libertad y algunas armas para cuando se retire, por favor vístase lo más rápido posible, que la fiesta esta apunto de empezar, la Duquesa esta impaciente... —Dijo Miriel antes de irse, aunque Adam se la pasaba dando cumplidos a Arwen, aunque los interrumpe para decir unas palabras. —Arwen, consíguele una ropa adecuada a para Adam, esta vez la duquesa necesita que se exponga, es necesario para darse a conocer ante lo nobles y por favor no duren mucho esta vez, la duquesa odia que la hagan esperar.
Arwen cambia a Adam, hasta que se ve como todo un adonis con ese traje de fiesta, luego, así que ambos son escoltados a la fiesta en el salón para fiesta, ellos entran a la fiesta, él queda impresionando por la decoración, los lujos y las personas de la nobleza, aunque se encuentra renuente con seguir avanzando pero ella se aferra a su brazo, ambos se miran, ella lo calma con una sonrisa, luego miran hacia el centro, la duquesa lo presenta a su héroe, Adam Anderson, los nobles le aplauden, por un momento esos aplausos, llenan de orgullo el alma de Adam, es música para sus oídos, él está saludando a la gente, pero había gente que murmura mal de él, los ignora hasta que llegar con la duquesa. Ella lo presenta con otros regentes de la zona, Adam los saluda, así como otros nobles, aunque siente que esos halagos están vacíos, por dentro. La duquesa le susurra al oído Arwen para que invite a Adam a bailar.
—¿Sabes Bailar, Adam? —Pregunto Arwen.
—Una de mis compañeras esclavas, me enseñó a bailar, además de que los esclavos teníamos nuestras fiestas de vez en cuando, ahí está tu respuesta, Cariño. —Respondió Adam que la lleva al centro del salón.
La Duquesa pide que toquen una pieza, así que ellos bailan una música un poco movida.
—No, bailas mal, Adam. —Susurro Arwen.
—Ni tu tampoco, Arwen. —Susurro Adam.
Ambos bailan como si no hay un mañana, al fin de cuentas, Adam solo la ve a ella, ve su felicidad, eso es lo más le importa en ese momento, luego se tomaron una pausa, para comer y beber un poco. Así que Miriel, se le acerco a él, con una copa de vino y unos bocadillos.
—Lord Adam, le veo un poco cansado, le parece bien, si le sirvo un poco de nuestro buen vino, además de algunos bocadillos, para que se satisfaga, tómelo como una señal disculpa. —Dijo Miriel muy contenta y servicial.
—No soy muy fanático a la bebida, pero por ti me lo voy a beber. —Contesto Adam que se da un gran sorbo y come algunos bocadillos.
La duquesa decide hacer un brindis con el vino que Miriel le sirve, ella brinda por Adam, por salvar al reino de su inminente destrucción, todos levantan sus copas y brindan por ello, hasta que uno de los nobles pregunta, por la cabeza del Campeón, para validar su veracidad, así que le pide sus soldados que traigan la cabeza del campeón del infierno, ellos la traen una bandeja donde los nobles se impresionaron al verlo, pero, Adam está comenzando a tener alucinaciones con la cabeza, en vez de la cabeza del campeón, vio su cabeza, miro a su alrededor a todos muertos de la forma más brutal y salvaje posible. Esto hace que entre en pánico, se da varias palmadas leves a la cabeza. Miriel se percata de esto.
—¿Adam, estas bien?, te noto fuera de sí. —Pregunto Miriel.
—No te preocupes, no soy muy tolerante a la bebida, aunque me siento un poco raro, no le digas nada de esto a la duquesa y Arwen, seguiré con la fiesta hasta el final. —Susurro al oído a Adam.
La fiesta sigue con normalidad, aunque a la duquesa le pasa algo similar, más tarde ella manda a dar por finalizada la fiesta, Adam es escoltado por Arwen, Miriel y unos caballeros a su cuarto, lo ponen en su cama, así que Miriel le quita la ropa y le pone su pijama, lo arropa con la sabana, pero no sin antes darle a beber un brebaje para que tenga un buen sueño. También va hacia donde la duquesa y ella le hace lo mismo a que le hizo a Adam, pero a la duquesa.
Mientras tanto, el duque esta llegado a su castillo en su carruaje.
—Entonces mi esposa, no murió en la emboscada, tengo entendido. —Pregunto el duque a uno de sus espías.
—Exacto, ella fue salvada por un Kulu esclavo insurrecto llamado Adam Anderson, mientras usted no estaba, el reino fue atacado por el campeón del infierno, sin embargo, el Kulu lo derroto junto a su ejército con sus propias manos, si bien fue asistido con armas bendecidas, logro lo derrotarlos a todos. —Contesto el espía.
—Una pregunta, él es leal a la duquesa, ¿cierto? —pregunto el duque.
—Pese al poco tiempo que tienen conociéndose, su relación es muy fuerte, al parecer el darle su libertad, le hizo ganar su confianza, aunque creo que es más porque la duquesa lo ve como su salvador, imagínese su majestad, lo ve como su salvador, aun así, debemos sacarlo del medio cuanto antes, su majestad. —Exclamo el Espía.
—Y no hay una forma de que se nos una a nosotros, ya que sería un desperdicio, matar al héroe que derroto a un ejército entero y al campeón del infierno, si hay otro ataque como ese, dudo mucho que el héroe llegue a tiempo para salvarnos. —Contesto el duque.
—Es entendible su señoría, sin embargo, le voy a decir una información que nuestra espía infiltrada escucho de una conversación que tuvo la duquesa y Adam donde hablan que la razón por la cual el campeón del infierno iba a atacar la ciudad, es porque el campeón dejo escapar a varios Kulus para que se volvieran fuertes dándoles treinta años para que crezcan sanos y fuertes para que vencieran varias oleadas de monstruos que él mandaba de vez en cuando para probar su fuerza pero el punto de quiebre llego cuando había pasado tiempo establecido mando una horda para destruir los lugares de la zona que tuvieran a Kulu como esclavos, como la ciudad, la mansión Cunningham así como a cualquier mercader esclavista que tuviera uno o varios en su poder, uno de nuestro espías fue testigo de la afirmación del campeón, observe. —Explico el espía mientras le muestra una esfera de cristal que presenta lo acontecido con Adam y el campeón, pero algo no cuadraba ya que había mensajes subliminales en las imágenes que le dan una orden al duque de hacer lo que tiene que hacer.
Así que la carrosa del duque llega al castillo, mientras tanto alguien entra al cuarto de Adam, él estaba durmiendo plácidamente, hasta que le desarropan la sabana, esta persona se quita la ropa se pone encima del, comienza a tocar, esto despierta a Adam y ve a Arwen.
—Arwen, ahora no, que tengo sueño. —Dijo Adam indispuesto.
—Vamos, mi héroe, necesito que tu espada gruesa y firme penetre mi vagina. — Contesto "Arwen" deforma desesperada y seductora.
—mi héroe... pero si la única persona en este mundo que me dice mi héroe es...—Exclamo Adam horrorizado y susurra. —la duquesa Madeleine Malory.
Si bien es la duquesa, en los ojos de Adam es Arwen, ella se abalanza hacia Adam, pero él la detiene, hasta que alguien abre la puerta de golpe, quien resulta ser el duque con la guarda real, el pobre ve horrorizado a su esposa desnuda con Adam en sus brazos.
—COMO TE ATREVES, MALDITA ZORRA, A TRACIONARME DE ESTA FORMA, CON ESTE MALDITO NEGRO KULU. —Exclamo el duque señalado a Adam.
—MIRA QUIEN HABLA POCO HOMBRE, TE ACUESTAS CON TODAS LAS SIRVIENTAS Y MUJERES QUE SE TE PASAN POR TU CAMINO, APUESTO QUE FUISTE TU, QUE ORQUESTO MI MUERTE. —Grito la duquesa que se defiende ante la acusación del duque.
—CLARO QUE SI, POR TU CULPA PERDI, LA CONFIANZA DE MI AMADO PUEBLO. —Respondió el duque.
—SI NO FUERA POR MIS DECISIONES, TU CABEZA ESTARIA EMPALADA EN UN PICO. —Contesto la duquesa.
—YA ESTOY HARTO DE TI, GUARDIAS, ACABEN CON ELLOS, AHORA. —Exclamo el duque dándoles la orden a los guardias de acabar con ella.
Los guardias se abalanzaron hacia ella, pero Adam de forma instintiva se interpone para defender a su majestad, así que evade un espadazo por parte de unos guardias, le conecta un codazo para aturdirlo que hace que deja caer su espada, la toma, emplea la técnica de media espada, le acierta un golpe con el pomo de la espada que lo tumba, esto los sorprende.
—yo quería resolver esto de forma civilizada, pero si no quieren que los mate de una forma brutal y sangrienta, retrocedan ahora, o si no los mandare al infierno con mis propias manos. —Exclamo Adam que le apunta con la espada al cuello del duque.
—Quien te crees que eres para darme ordenes, acaso no sabes quién soy yo. —Contesto el duque que se siente amenazado.
—Aquel que salvo a tu reino de su destrucción, Yo, el apuñalador oscuro, Adam Anderson, la reencarnación de Mulitor, violador de ejércitos, el héroe de Seras y el nuevo campeón del infierno, por eso, YO se lo digo, así que, si no quiere que vuelva el reino en cenizas, sométase o perezca. —Exclamo Adam.
Sin embargo, el espía se encontraba dentro de los soldados, le lanza un brebaje que hace que le arda la piel, provocando que pierda la concentración y se tropiece con una de las esquinas de la cama, el duque le arrebata una de las espadas a un guardia para darle una estocada a Adam al corazón, pero la duquesa se pone en el medio, recibiendo la estocada en su corazón. A Adam se le salen las lágrimas, la duquesa le acaricia la mejilla.
—Aunque el mundo entero, este en contra tuya, yo siempre estaré de tu lado, mi héroe. —Dijo Malory mientras ella cae y muere en los brazos de Adam.
Algo se rompió dentro de él, Adam la abraza mientras lloraba.
—Tú no eres héroe, solo eres un monstruo que debió ser erradicado, hace mucho tiempo. —Exclamo el duque mientras alza su espada para darle el golpe final, pero Adam mira hacías atrás muy levemente, él baja su espada de golpe, pero en un instante, Adam voltea la cabeza y de un poderoso mordisco rompe la espada partiéndola por la mitad.
Adam reacciona en el instante atrapa la parte que salió volando, le corta el vientre, provocado que se le salgan las vísceras, el duque retrocede mientras se trata de entrar las vísceras dentro de su vientre, los soldados se abalanzaron hacia Adam, pero toma la sabana de la cama, se las lanza hacia ellos para distraerlos, levanta la cama con su fuerza bruta, toma la mochila que le dio Miriel, se la pone, aunque se la quita un momento para tener mejor movilidad ya que aprovecha que algunos caballeros están aturdidos, toma una espada corta y un maza, con la maza les rompe sus armadura y apuñala los cuellos de los caballeros con la espada corta sin misericordia, divisa a un caballero con una complexión física igual que la de él, le apuñala en el cuello matándolo en el proceso, le quita su armadura se la pone, le arranca el intestino delgado con la distancia suficiente para agarrar al maldito duque. Se pone su mochila nuevamente que posee en su interior la armadura de escama de dragón, sus armas benditas las cuales no va a usar en esta guerra de un solo hombre por si acaso se va a enfrentar con los demonios o monstruos del infierno y sobre todo el cuerno del campeón del infierno.
El duque es escoltado por varios guardias, sin embargo, Adam sale del cuarto, lleno de ira y sed de sangre. Mas guardias, fueron por los dos lados del pasillo, rodeando a Adam haciendo una muralla de escudo, en los dos extremos de los pasillos, así el al verse rodeado decidió entrar nuevamente a su cuarto, saca varios cadáveres para defenderse, ya que no quiere echar a perder las armas que acaba de recoger rápidamente, además de es humanamente posible atravesar la muralla de escudos con lanzas, por lo que él toma varios de los cadáveres, lo lanza hacia ellos en el aire, llamando su atención y bajando su moral, pero esto es una distracción, toma un mazo medieval, un cadáver, se manda a correr de forma kamikaze hacia las lanzas, toma el cadáver que tenía en sus manos, lo usa como escudo, el cadáver es atravesado por las lanzas pero Adam con la maza las termina de destrozar, atraviesa la formación, embiste a uno de los guardias, le quita el casco, conecta un poderoso cabezazo que lo noquea, le saca la espada corta, utiliza el cuerpo del soldado caído como escudo, se los lanza para retrasarlos, se va corriendo a máxima velocidad, siguiendo el rastro de sangre del duque hasta que logra divisarlo, uno de los guardias se interpone para darles tiempo, pero se quita la mochila, se la lanza hacia él, este se distrae, Adam toma una lanza de una de las armadura decorativas, se desliza en el piso permitiéndole pasar por debajo de él, atravesar su cuello, luego encara a los otros guardas con las manos desnuda, él va esquivado los ataques de los guardias hasta llegar donde el duque, lo agarra, levanta, le hace una quebradora que lo deja invalido, con la fuerza de sus brazos y la rodilla, de forma rápida y brutal, lo termina doblado de forma inversa a la columna vertebral para después terminar partiéndolo por la mitad con su brazos, lanza el torso al aire, lo enreda con su intestino delgado, tira del torso y lo hace pedazos en aire, luego le lanza la otra parte de las piernas, un poco de viseras con sangre a los ojos, uno lo recibe, el otro se cubre, al que no se cubrió, le da una patada poderosa que le destroza la pechera y las costillas, dejando lo incapacitado, mientas que al otro, le rompe las manos, los brazos, las piernas hasta que Adam pone el pecho del guardia entre sus piernas, toma su cabeza y la va girando brutalmente hasta decapitarlo por completo.
Hasta que se acerca al otro para rematarlo, pero el pobre estaba llorando y escupiendo sangre.
—Porque nos haces esto Adam, que hicimos para merecer esto. —Dijo el guardia, mientras llora y escupe sangre, Adam se arrodilla para limpiarle las lágrimas y la sangre.
—Yo solo quiera irme de aquí de forma pacífica y sin molestar a nadie, que me recordaran como el héroe que los salvo de la extinción a manos del Campeón del Infierno, pero lamentablemente, eso es lo que ella no quiere. —Contesto Adam.
—Y quien ese ella, lord Adam. —Pregunto el guardia.
—Esa es la diosa Xenovia, ella odia mi existencia, hace todo lo posible para poner todo el mundo en mi contra y hacer de mi vida un infierno, pero lamentablemente, ahora, yo soy imparable e invencible, cada vez que sufro, cada vez que lloro, cada vez caigo, eso solo me vuelve más fuerte y me motiva más a lograr mi cometido. —Contesto Adam.
—Y ¿cuál es su cometido? —Pregunto el guardia.
—Pregúntaselo a ella, tú mismo. —Respondió Adam, mientras le rompe el cuello.
—Debí preguntarle su nombre, se nota que era un buen hombre, odio matar a las buenas personas, lamentablemente, él se interponía en mi camino, pero nada que se puede hacer. —Pensó Adam mientras se va corriendo por los pasillos y siguió pensando. —Tengo que salir de aquí, lo más rápido posible, aunque que pasara con Arwen, ya que ellos me vieron saliendo con ella, tengo que sacarla de aquí.
Adam toma su mochila, algunas de las armas de guardias que mato, recorre el castillo buscando a Arwen, si bien se encuentra en varias ocasiones con uno o varios guardias, los mata sin misericordia y sin dudarlo, hasta que escucha una voz femenina que lo llama.
—Arwen, eres tú. —Pregunto y exclamo Adam.
—Si, soy...—Exclamo Arwen que esta al doblar del pasillo, pero alguien la apuñalo por detrás, ella cae al piso.
—ARWEN—Grito Adam que va corriendo lo más rápido posible, él llega hasta donde ella, se percata que la mato se va corriendo, pero él le lanza una espada corta a su pierna que lo termina inmovilizado.
—Adam. —Dijo Arwen que está muy débil.
—No te preocupes, te sacare de aquí, hare todo lo posible para sacarte de aquí, te llevare con un buen médico...—Contesto Arwen.
—No te preocupes por mi Adam, al final de cuentas, yo no estoy en tu futuro, aunque no pudimos tener una relación decente, después de todo lo que hiciste por nosotros, quería ser alguien útil en tu vida, ahora te voy a ayudar, ves la persona que me apuñalo...—Dijo Arwen que estaba agonizando.
—Si, porque lo que lo dices. —Contesto Adam.
—Recuerdas la mochila, que te dio Miriel, sí. —Respondió Arwen.
—Si, por qué. —Contesto Adam.
—Ella te dio una mochila falsa, mientras dormías, yo te la cambie por la real ya que la duquesa sabía que Miriel se iba a desquitar contigo tarde o temprano, así que ella me ordeno que la cambiara cuando estuvieras dormido, por una mejor que esta, de un material igual que tu armadura, por lo que también es anti mágica, esto te ayudara a enfrentarte al desgraciado que me apuñalo que es un usuario de Magia, lo que te va a dar una oportunidad para enfrentarte con él, solo quería decirte esto, aunque todo el mundo esté en tu contra yo siempre estaré contigo, Adam.—Dijo Arwen mientras con las pocas fuerzas que le quedaban le da un beso en la boca, para que al final exhale su último aliento y muera en sus brazos.
Adam se pone a llorar, la abraza con fuerza y maldice a la Diosa Xenovia por el destino fatídico que ella y la duquesa pasaron por su culpa. Sin embargo, no era el momento se llorar, el asesino se quita la espada de la pierna, la regenera con magia, aunque Adam previamente lo tenía en la mira sin que él se diera cuenta, deja a Arwen acostada en el piso, toma la mochila que tenía cerca, se dispone a buscar lo que sea dentro de su interior con el fin de usarlo como arma.
—Acaso crees, Argenis, que con un arma podrás detener a este usuario de magia, aquí la magia es como las armas de fuego, Argenis. —Dijo el asesino poseído por Xenovia.
—Maldita perra, estas detrás de todo esto, otra vez, como te atreves hacerme esto, solo dije que te lo iba a meter y ya, tienes que joderme mi maldita existencia constantemente, solo porque te da tu maldita gana, COÑO. —Exclamo Adam se para.
—Yo soy una Diosa y tienes que respetarme. —Exclamo Xenovia.
—PUDRETE, XENOVIA, te perdí todo el respeto, cuando reencarné en este infierno de mierda, estuve treinta años siendo tratado como una mierda, ahora que, POR FIN, alguien me trata como yo quiero ser tratado, vienes tu maldita perra del diablo, y lo mandas todo al diablo, púdrete, ahora con más gusto te voy a violar, POR TODA LA ETERNIDAD. —Respondió Adam, se pone en posición de ataque, pero sin quiere en vez de sacar un cuchillo, saca el cuerno del Asmodeus de forma inconsciente.
Xenovia se ríe diabólicamente.
—Esto se acaba ahora, yo, la diosa Xenovia te daré un poder que nunca podrás imaginar, yo te bendigo en mi nombre, ahora acaba con ese demonio negro de una vez por todas y te considere todo lo que quiera lo quieras. —Exclamo Xenovia, dándole un poder inimaginable e incalculable.
—Lo que quiera. —Contesto la asesina.
—Si, hija mía, lo que quieras. —Respondió Xenovia mientras la asesina se quita la capucha y la máscara.
—Vaya, vaya, hablando de la reina de roma, pero si es la perra traidora, Miriel.—Contesto Adam que se percata de la voz de la asesina.
—Sabes, Adam, yo siempre te odié desde el primer día que te conocí, pero ahora le hare un favor al mundo, de eliminarte de una vez por todas. —Respondió Miriel.
Adam se ríe y se burla de ella.
—Voy a violarte tan duro, que esto servirá de ejemplo a la diosa Xenovia, de cómo la voy a violar, aunque eso será una fracción de ello. —Exclamo Adam mientras él se abalanza hacia ella.
Ella se potencia al máximo, antes de que el contraatacara, algo extraño pasa en ese instante. La mano que agarra el cuerno del campeón comienza a brillar de un color similar a lava ardiente esto comienza a esparcirse por las venas de su cuerpo. Aun así, ella no retrocede, pero ya era demasiado tarde, cuando ella trata de apuñalarlo con un cuchillo en el estómago, él lo atrapa con la yema de los dedos, le conecta un rodillazo en el vientre para aturdirla, con el brazo que tenía el cuerno, se lo clava en el ojo izquierdo anulando el poder que Xenovia le dio.
Ella comienza a gritar, él saca el cuerno del ojo, le propia una tremenda paliza hasta desfigurarle la cara, se baja los pantalones, le penetra el único ojo funcional que es el derecho, ella trata se morderse la lengua, pero él se percata de ello, deja de penetrarle el ojo, evita que ella muerde su lengua entrando su mano en su boca, ella trata de morderle la mano para arrancarle los dedos, para su desgracia la fuerza bruta de Adam la supera, le disloca la quijada para que la boca no pueda abrir ni cerrar su boca, así que le mete su miembro en toda su boca que quedo inutilizable, él la penetra brutalmente con una furia indescriptible al punto que la pelvis le choca en la boca, hasta que el miembro llega dentro de su esófago.
—ACASO CREES QUE HEMOS TERMINADO, tal vez no puedas ver, pero tu cuerpo lo siente, voy a destruirte puta de mierda. —Exclamo Adam que tenía su verga posándose en la cara de Miriel, la pobre esta aterrada.
Él la pone en posición de misionero, la comienza a penetrar, hasta que le rompe su ropa, comienza a manoséale los senos bruscamente, le chupa las tetas, se las mordía hasta terminar de deformarla con los mordiscos, hasta que estaba a punto de venirse, le entierra sus uñas en sus senos, se las arranca de un jalón, ella grita, pero como tiene la quijada desencajada, no puede articular las palabras.
—COMO SE SIENTE...COMO SE SIENTE, MALDITA PERRA. —Exclamo Adam mientras se viene dentro de ella, para luego se pone a violar sus tetas cercenadas.
En un arranque de excitación, le mete el puño dentro de su vientre, le saca su intestino delgado para ahorcarla, la pone en la posición de perro tumbado, le penetra el ano, la embiste brutamente, la asfixia con su intestino, le enrolla el intestino delgado en toda la cabeza, hasta que se viene y le aplasta la cabeza tirando de los intestinos.
Adam lanza un grito al cielo, pero no de satisfacción, sino de dolor ya que, eso no quitara el dolor que siente al perder a Arwen y la duquesa, los guardias lo encuentran, ellos quedan horrorizados por el diabólico acto, él mira a su alrededor, ellos comienzan a rodearlo con pavor, de repente, se ríe diabólicamente y se incorpora.
—Se que están enojados conmigo porque hice mierda al duque, así que les propongo un trato, usted me deja irme en paz como si nada, mientras siguen con sus vidas con si nada hubiera pasado, algo que sabemos que no va a pasar, o los mato a todos ustedes de las formas más diabólicas que sus pobres mentes podrán imaginar, la decisión es suya. —Dijo "Adam" ya que tan como Adam y Mulitor decidieron unir fuerzas para salir con vida de ahí, pero los guardias se mantuvieron firmes en vengar a su querido duque.
Así que Adam toma su mochila que está cerca de él, el cuerno lo pone en su mochila, se termina de poner la mochila, toma el cuerpo de Miriel por la pierna, le quita una costilla al cuerpo, se abalanza a toda máquina hacia uno de los caballeros, hace lo mismo de hace un rato cuando fue a atrapar y ejecutar al duque, solo que con la diferencia, que lo que lanza hacia arriba, es la mochila, que utiliza el cuerpo de Miriel como escudo para que reciba la lanzas pero aprovecha ese ligero, instante, se desliza en el piso, para impactar a contra uniones de un escudo a otro, rompiendo un poco la formación, para terminar de destruirla por dentro, Adam aprovecha que está en el piso con la costilla en su mano les apuñala las fosas poplíteas de la rodilla (sobaco de la pierna) para debilitarlos, y diezmarlos por completo a punta de apuñaladas.
Una vez que Adam reduce el número de los guardias que están a su alrededor, toma a unos de los caballeros por la pierna, lo utiliza como arma para arremeter con los soldados, hasta que azota a un soldado moribundo que está en el piso hasta matarlo, la formación restante, se está acercando rápidamente sin romper la formación, pero como siempre Adam se percata de esto, lanza varios caballeros, para luego terminar abalanzarse como una locomotora fuera de control con dos escudos pesados, para romper la formación una vez más, le quita varias armas a los caballeros para utilizarlos en su contra, refractando sus ataques, para romper sus defensas con el fin de matarlos de las formas más crueles posibles, decapitado, mutilando, todo a su paso hasta dejar un pasillo lleno de sangre y cuerpos por doquier, se pone la armadura de un caballero que es de su tamaño, recoge nuevamente la mochila, se la pone, sigue con su camino pero comienza a recordar, a la duquesa y Arwen, se sienta en el piso un momento y comienza a llorar.
—No, es ahora de llorar, campeón. —dijo alguien que se le está acercando, y añadió. —Los hombres no lloran, te ves patético Adam.
Adam se incorpora y lo mira.
—Si, claro, deja de hacerte el macho conmigo, capitán james, apuesto a que llorarías como una magdalena, si las personas más importantes de tu vida murieran de forma injusta, esta no es la primera vez que lo hago, capitán, ahora que quiere conmigo capitán, acaso su ejército y usted, están preparados para morir. —Contesto Adam.
—Sabes, Adam, yo si estoy preparado para morir, pero escucha lo que tengo que decir, sé que no mataste al duque porque quisiste, yo fui testigo de cómo un solo hombre se enfrentó contra el campeón de infierno y su ejército, yo soy testigo del nacimiento de un héroe, tú eres un héroe Adam, pero lamentablemente lo echaste todo a perder...o...simplemente todavía sigues siendo un esclavo por dentro, tal vez y solo tal vez, habría una forma de evitar que esto pasara, si las cosas hubieran sido diferentes.—Respondió James.
Adam se le ríe en su cara.
—Que están gracioso, Adam, acaso dije algo gracioso. —Pregunto James de forma incomodo.
—Lo gracioso es que alguien como tú, me diga que las cosas se pudieron haber resuelto de una forma pacífica, pero al final de cuentas, las cosas pasan porque tienen que pasar, dime cuantos conflictos del reino de Seras, no se pudieron resolver hablando, cuando derramamiento de sangre se pudo haber resuelto hablando, tus manos como las mías están llenas de sangre por la decisión de otras personas, sé que no te quedaras de brazos cruzados porque mate al duque, sé que solo quieres ganar tiempo para que el ejército llegue para tener más ventaja a la hora de matarme, pero lamentablemente ustedes no son rivales para mí, James, así que lárgate ahora o... —Respondió Adam, mientras toma una espada larga que está en el piso con la pierna, se la lanza a las manos y añadió. —MUERE EN PEDAZOS.
El capitán desenvaina su espada, ambos se abalanzan e intercambian espadas, si bien Adam le gana en fuerza, velocidad, agilidad y resistencia, pero la experiencia en combate del capitán le jugo a su favor, mediante varios golpes y cortes en lugares específicos con el fin de lograr debilitarlo temporalmente, además de emplear técnicas de espada larga medieval para reducir la fuerza de Adam de forma considerable, para aguantar lo suficiente, logrando que caiga al piso de rodillas, aturdido y debilitado dejando el cuello de Adam indefenso, sin embargo esto a Mulitor, ni a Adam le hizo gracia en lo absoluto, el entra en un estado de rabia e ira indescriptible que nublan su juicio, cuando el capitán le va a dar el golpe final, él logra girar el cuello hasta casi romperlo atrapado la espada del capitán con sus dientes como si fuera un perro rabioso, lo levanta como si fuera un muñeco de trapo, pero él capitán se suelta, aunque Adam le da un poderoso puñetazo en la entrepierna que lo deja privado, el pobre capitán no aguanta el dolor inconmensurable, Adam se reacomoda su cabeza, se levanta como si nada, los ojos se ponen blancos, se percata que está sangrando, pero con la fuerza de sus músculos las cierra como si nada. El pobre capitán pedía clemencia, pero él esta cegado en un estado que lo vuelven en alguien primitivo y violento, así que Adam lo toma una pierna, lo levanta como si nada, lo azota varias veces al piso hasta hacerlo puré, los soldados logran llegar demasiado tarde, su capitán había sido brutalmente asesinado, se percata de ellos, les lanza a su capitán, toma su mochila, se la pone otra vez, toma de entre los cuerpos del piso, dos mazos medieval, dos espada larga, en cada extremidad, se abalanza hacia el ejército, les aplica el tornado sangriento pero a menor velocidad, para que la mochila no salga volando, aun así el enfocaba toda su fuerza en sus extremidades para obtener la mayor potencia, si bien carecía de velocidad, su fuerza, potencia de impacto y precisión son más efectivas.