Después de que Xenovia sea testigo de que Argenis está vivo, decide irse al soul heaven a la cima de la torre de Syphus, específicamente en el bar personalizado de Alheim donde la diosa Xenovia hunde sus penas en vivida. Ella le cuenta todo lo acontecido desde que los sucesos del capítulo 1 hasta el capítulo 4.
—Creo que necesito ir al baño. —Dijo Alheim que está muy excitada al respecto.
—Te vas a masturbar en su nombre, Alheim.— Contesto Xenovia que la mira con repulsión con la cabeza acosta en la barra.
—¡Ah! pero no te enojes conmigo, Xenovia, tú sabes cómo me pongo cuando veo un guerrero de la categoría de Argenis, yo sé que el tipo es un mamahuevo, lambón de mierda, pero en ese mundo de fantasía, se volvió un hombre ¡coño!, por eso me gusta incluso más del hombre con el cual tuve un hijo. —Respondió Alheim.
—¡Oh! ¡tu un hijo! l ¡cuéntame sobre él! me extraña que alguien tan malvado como tú, pueda tener uno. —Exclamo Xenovia que me levanta el ánimo.
—Me lo reservo, si hablo de él, me encariño de él. Cambiemos de tema como vamos con la destruccion de tu multiverso —Contesto Alheim.
—Hasta ahora va un 0.1%, no es fácil desaparecer de golpe un multiverso porque, si hay muchos hilos que cortar, el multiverso es como un órgano vitar que tiene que extirparse con delicadeza y evitar que el sistema de defensa del metaverso se active. —Respondió Xenovia.
—Espero que me den un espacio, porque me voy a quedar sin un lugar donde vivir junto con mi soul Heaven.—Contesto Alheim.
—Lo tendrás, según los altos mandos, una vez que este multiverso sea destruido, lo volverán a hacer. —Respondió Xenovia.
—Eso me genera mis dudas, realmente. —Contesto Alheim.
—No te preocupes todo saldrá bien. —Respondió Xenovia.
En ese momento, alguien toda la puerta del bar.
—Unos centinelas, pero que hacen aquí. Los dejare pasar. —Contesto Alheim que siente su presencia.
Unas estatuas vivientes con lanzas se acercan a las diosas.
—A se debe su presencia en mi humilde hogar. —Respondió Alheim.
—Venimos a llevarnos a la Diosa del multiverso Z29P4 Xenovia HeavenRoad ante Xenathor, debido a que usted ha cometido un crimen en contra del multiverso Z29P4. —Contesto uno de los centinelas.
—¡Espera, que! ¿Cuáles son los cargos? —Exclamo Xenovia que se altera al respeto.
—Convertir al alma 1187514919251495124512151919114201519 en un isekai Lander. —Dijo el centinela.
Xenovia se queda perpleja por lo que el centinela acaba de decir.
—Está bien, iré con ustedes. —Contesto Xenovia que acepta su responsabilidad que es escoltada por ellos.
—¡Alto! podrías darme el orbe, de mi amorcito. —Respondió Alheim.
—¡Toma, maldita puta! —Contesto Xenovia que le lanza el orbe donde se puede visualizar el mundo donde esta Argenis.
Xenovia es escoltada hacia la dimensión de Xenathor que es el dios del metaverso 767676 que le esta esperado de espaldas a ella.
—Xenathor, mi señor su humilde sierva ha venido a presentar...—Dijo Xenovia que se arrodilla ante él mostrando sus respetos.
—Guárdate tus respetos, Xenovia, por tu orgullo has creado a un ser que puede poner en peligro tu multiverso. ¿Sabes lo que le paso a varios multiversos que trataron de hacer lo mismo? —Contesto Xenathor mientras se da la vuelta.
—Si, lo que se he puesto en peligro a mi multiverso, aun así, que importa, si lo van a destruir, acaso le tienes miedo a un Isekai Lander. —Respondió Xenovia.
—Yo no le tengo, pero tu si, ya que apostate tu pureza en este juego, al menos tendrás algo en con que entretenerte mientras tanto, por lo que te recomiendo vencer y destruir al Isekai Lander que creaste antes que se complete la destruccion del multiverso. —Contesto Xenathor.
—Una pregunta, lord Xenathor, que va a pasar después que se complete la destruccion de mi multiverso asignado, van a crear uno desde cero o que. —Respondió Xenovia.
—No he recibido respuesta desde arriba, ya que tu multiverso es un caso especial pero no te preocupes, te informare en cuanto reciba la información. —Contesto Xenathor.
—Entendido, mi señor, procurare destruir al Isekai Lander, si eso es todo puedo retirarme. —Respondió Xenovia.
—Otra cosa, me he percatado que en la zona central de tu multiverso tienes varios seres que están perturbando el orden natural algunos universos, que ha sido de ellos. —Comento Xenathor.
—Ese problema, estoy trabajando en ello. —Respondió Xenovia.
—Porque me enterado de esas amenazas pueden llegar a estar al nivel del Isekai Lander, acaba con ellos sin perturbar el estado natural de las cosas. —Contesto Xenathor.
—Está bien, mi señor, si me disculpa, me retiro. —Dijo Xenovia mientras se retira.
—Aborto divino, que bueno que lord bloodhead no me elimino junto con mi metaverso. —Contesto Xenathor después que ella se teletransporto.
Después de eso, ella vuelve a su punto de control de almas para mandarlas a varios Isekai, ella se pone a reflexionar al respecto:
>>Odio mi existencia, no puedo creer que cuando fui creada junto con este multiverso, me tenga que pasar esto. El universo 0000 que creo esa tecnología multiversal-interdimensional que me va a generar muchos problemas en el futuro y no sé cómo destruirla sin alterar el orden natural de las cosas. También están esto bucles universales que me tienen loca y ahora tengo a un Dios o pseudo-dios que se alió contra uno de mis mayores pesares y ahora tengo a Argenis encima.
Ahora que lo pienso, creo que puedo utilizar estas situaciones para acabarlos a todos de una vez por todas, pero tengo que hacer una buena planificación para esto.
En ese momento, ella se ríe diabólicamente. Después de termina con su jornada de almas, ella se pone a vigilar lo que Argenis está haciendo ahora.
Adam se encuentra caminando kilómetros hasta llegar a un lago donde ve un poco de agua. En ese momento es de día.
—He estado caminando, sin rumbo durante días, escondiéndome de la gente, ahora que hago. —Pensó Argenis.
—Si, tienes razón, Asmodeus, ¿cuándo va a llegar el hell dealer para matar y violar al rey demonio? —Pregunto Mulitor.
—¿Violar? ¿cómo así, mulitor? a mí me gustan las mujeres. —Contesto Adam que siente repulsión por lo que dijo Mulitor.
—En serio, Adam, a esta altura del juego, no sabes que, ¡yo!, Mulitor soy un ser de maldad pura que destruye, viola todo a su paso. —Respondió Mulitor.
—Eso yo lo sé, pero prefiero violar a la diosa o a una perra de mierda que este bueno o por lo menos que tenga tetas grandes, pero yo no se lo meto... a hombres...o lo que sea. —Contesto Adam asqueado.
—En serio Adam, acaso no te dijeron de donde provienes. Tu eres un kulu, hijo de la Diosa Kray, heraldo de la destruccion, tu naciste para sembrar muerte y destruccion en este mundo. —Respondió Mulitor con orgullo.
—No, me quiero imaginar todos los problemas que han pasado por ese tipo de mentalidad. Te puesto que tenían muchos problemas gracias a eso. Al menos no querías algo o no había algo lo cual no pudieras destruir. —Contesto Adam que sigue su camino por el bosque.
—Si, nuestras costumbres son muy autodestructivas, pero nos la arreglábamos, Por ejemplo, cuando depredamos todos nuestros bosques y empezó la sequía, sentimos que la diosa nos castigó, así que tomas las semillas que nos quedaban, las plantamos, y cuidamos a los árboles para que nos den comida. Hasta los consideramos como un dios más. —Respondió Mulitor.
—Ósea, cada vez que se excedían con algo, lo arreglaban... ¿Cierto? —Contesto Adam.
—Si, realmente. —Respondió Mulitor.
—Una pregunta, Mulitor, yo quiera saber...—Contesto Adam que está pensado.
—Si, Adam, me vas a preguntar qué tan poderoso soy, ya que me había enfrentado al inferno y a Asmodeus.—Respondió Mulitor.
—Si, por favor, me interesa y si los tengo ahora. —Rogo Adam.
—Se nota que estas desperado por ir por el camino fácil, Adam. —Contesto Mulitor.
—Pero Mulitor, acaso no sabes por todo lo que pase, necesito un respiro de vez en cuando. Sobrevivimos con suerte a los ángeles enviados por Xenovia. Si, Asmodeus esta tan obsesionado contigo es por algo. —Exclamo Adam.
—Está bien, Adam, te lo diré, ya que nunca me había sentido tan vivo en mucho tiempo. —Contesto Mulitor.
—Por fin, estoy preparado, cuéntamelo todo. —Exclamo Adam contento con una voz afeminada.
A continuación, Mulitor comienza a contarle sus poderes:
>>No sé dónde empezar, yo pude cargar el cielo en mis hombros cuando insulte a la diosa un día, me enfrente a monstruos proveniente de las estrellas, corrí por las aguas...
—¡MIERDA, Y COMO RAYOS NO ME DISTE ESOS PODERES, EN PRIMER LUGAR...OH... LE HUBIERA PATEADO EL CULO AL REY DEMONIO HACE RATO, ¡DAME UNA RAZON POR LA CUAL NUNCA ME LO DISTE EN PRIMER LUGAR! —Grito Adam frustrado, enojado, lleno de rabia.
—Si, hubiera sido así, ya la hubiera destruido el mundo hace mucho tiempo. No lo crees. —Respondió Mulitor de forma desalentadora.
—Bueno... tienes razón... ¿qué paso, mulitor? cuéntame. —Contesto Adam intrigado.
A continuación, Mulitor le cuenta lo acontecido:
>>Yo también quise derrotar a la Diosa Xenovia, por lo que mi pueblo destruimos y profanamos sus templos, violamos y matamos a sus seguidores. Cuando calmamos la paciencia de la diosa, ella nos propino la paliza más brutal despiadada y humillante. Ella nos mató y revivió de todas las formas posibles. Si bien era el cielo al principio, después de unas cuantas muertes se volvió un infierno e incluso hizo lo mismo con nuestra Diosa, yo sentí como mi orgullo, autoestima estaba por el piso. Por lo que me rendí y pedí clemencia, me humillé ante ella. Ella se ríe de forma malévola y desapareció.
Desde ese día no quiera ver a nadie, yo me aparte de todos y morí de depresión, pero la diosa Kray me concedió la habilidad de reencarnar en mis descendientes, como castigo y nos dejó a nuestra suerte. Aun así, mis descendientes me dieron la fuerza para seguir adelante pero no era lo mismo, tu padre quiso levantarme el ánimo peleando contra el infierno y ya sabes lo que paso.
Ahora reencarne en ti, por lo que me has dado un poco de esperanza, derrotando a legión dos veces, al campeón del infierno y con ayuda de este último derrotaste a Vandriel, un arcángel de la Diosa. Aun así, no me terminas de convencer cuando vayamos al infierno, sentirás lo insignificante que somos.
—¿a qué te refieres con eso? —Pregunto Adam intrigado.
—Porque el nivel de los demonios es superior en el infierno que en la tierra. Los demonios bajan su nivel de poder cuando suben aquí, lo mismo con los ángeles ya que es un acto de guerra, usar nivel de poder real. Aunque te de mis poderes, no vas a poder vencer al rey demonio. —Dijo Mulitor de forma desesperanzadora.
—Mira Mulitor, yo no voy a dudar de tu experiencia pasada, pero... hemos sobrevivido a mucha mierda desde que nací, por lo que ahora, no podemos dar vuelta atrás, así que encontraremos la forma para vencer al rey demonio de una vez por todas. Cueste lo que cueste. Así que, si tu no me vas a ayudar, entonces yo lo hare por mi cuenta, ¡Soy el apuñalador oscuro y YO VENCERE AL REY DEMONIO! —Exclamo Adam lleno de orgullo.
—La esperanza es un error, Adam, no dejes llenar por ese orgullo tan vano...—Contesto Mulitor.
—¡VANO! ¡CREES QUE TODA LA MIERDA QUE TUVE QUE AGUANTAR POR ESA FAMILIA DE MIERDA FUE EN VANO, LA DESTRUCCION DE SERAS FUE EN VANO! Mi orgullo tiene una base firme como una montaña, ya no voy a seguir hablando contigo. —Respondió Adam.
—Ay, por favor, Adam, no lo trates así. —Contesto Asmodeus desde el cuerno.
—No, asmodeus, a mí nadie me va a bajar el ánimo. Y el hell dealer para cuando, Campeón. —Respondió Adam.
—No te preocupes, un hell dealer que yo conozco que se llama Dublín Goldberg, le pregunte cuál era su ruta y va a pasar por el continente de Rakildor, por lo que tienes todo el tiempo del mundo. —Contesto Asmodeus.
—No me digas que para cuando llegue estaré muerto. —Respondió Adam.
—No, claro que no, lo que yo me mas quiero en el mundo es un segundo asalto. —Contesto Asmodeus.
—Si, tú lo dices. —Respondió Adam y añadió. —Hay muchas cosas que quiero hacer antes de irme, necesito un nuevo aire en mi vida, tendré que esconderme durante un tiempo, si bien los medios de comunicación no son los más eficientes, pero por lo menos me darán un respiro.
Adam se va caminado durante kilómetros, adentrándose en el bosque, cazando animales para sobrevivir. Protegiendo a los inocentes de los bandidos y de paso robándole todo lo que tienen a estos últimos. Durante la noche se refugia en una cueva en una montaña, con las fuerzas de sus manos y varios materiales de la naturaleza fabricando hachas, picos y martillos. Con estas herramientas se hace una casa en el árbol para poder vigilarlo todo desde arriba.
—Qué bueno que las técnicas de supervivencia que me enseño Eldar hayan funcionado. —Pensó Adam mientras admira el bosque y le salen unas lágrimas, siente el viento del bosque lo conforta y añadió. —Tu muerte no será en vano, viejo amigo, yo te debo la vida junto con mis amigos esclavos, al igual que Arwen y la duquesa.
Adam sigue dejando que el viento lo consuele hasta que unos gritos lo ponen en alerta.
—Es hora de mi cita con el destino. —Exclamo Adam que se pone sus armas rápidamente para luego irse saltando por lo arboles como un volido hasta llegar donde unos goblins que están a punto de profanar a una doncella. En pleno aire, toma varias piedras del piso, las recarga en su honda y las dispara con la potencia de un arma de fuego que los mata en seguida.
—Está bien, señorita. —Contesto Adam que mira a los lados. La señorita se abalanza hacia él.
—Muchas gracias, señor de todo corazón, como puedo agradecérselo. —Dijo la señorita mientras unos caballeros van a socórrela.
—Está bien, señorita y quien es el. —Contesto el caballero.
—Solo soy un aventurero errante, mi nombre es Adam Anderson, se me perdió mis papeles durante una aventura y no tengo como volver al poblado, quiera saber si podrían ayudarme al respecto. —Respondió Adam y pensó. — Jabladura inda house, coño.
—Entiendo, Señor Anderson, el señor de esta tierra le está muy agradecido, acompáñenos para ver si él le puede ayudar con su predicamento. —Contesto el caballero.
Los caballeros escoltan a Adam hacia los dominios del señor del campo.
—Papi. —Dijo la chica que va hacia el señor del campo.
—Mi señor traemos a este aventurero errante que salvo a sus hijas de las garras de los goblins.— Contesto uno de los caballeros.
—Estoy en duda con usted...señor... —Respondió el señor del campo.
—Adam Anderson, el Dark stabber. A sus órdenes. —Contesto Adam.
—Un placer en conocerlo, lord Anderson, mi nombre es lord Harald Swern, estoy en deuda con usted por salvar a mi hija, últimamente esos goblins han sido una gran molestia en mis tierras...—Respondió Harald.
—Le tengo una propuesta, encontrare a los goblins y los erradicare mientras que usted me ayuda con mis papeles, no le cobrare nada, solo necesito establecerme en un poblado para seguir con mi aventura. —Contesto Adam.
—Suena razonable, hablare con mis contactos cuando empezará con la caza. —Respondió Harald.
—Ahora mismo, no hay tiempo que perder, así que, si me disculpa, mi lord, tengo que retirarme. — Contesto Adam que se da la vuelta para comenzar la cacería.
—Que la Diosa Xenovia lo bendiga, lord Adam. —Respondió Harald.
—Muchas gracias, Mi lord. —Contesto Adam, pero pensó. — Prefiero que sea Dios y no a esa puta.
Adam se va corriendo hacia el bosque, se va hacia las montañas y logra encontrar una cueva con muchas huellas de goblins. Él se quita la armadura, los guarda en los arbustos y solo se lleva su maza medieval.
—A trabajar, que estoy on fire.—Contesto Adam.
Adam se adentra a la cueva, campante y victorioso. Uno de los goblins que andaba por ahí, vio al imponente hombre negro que se acerca. Él golpe una de las paredes de la cueva, toma una roca se la lanza con potencia hacia la pierna rompiéndosela, se acerca lentamente.
—¡Hello motherfucker, llego mandingo el que te va a sacar ñamigo!—Exclamo Adam que le mete el puno por el culo y lo levanta para usarlo como escudo y añadió. —Llego el goblinator, mamahuevos, el goblin slayer me va a quedar chiquito.
Esto alerto a los Goblin que se abalanza hacia él, pero se los quita como si fuera un ariete viviente. Con el goblin que usa como escudo se lo lanza con brutalidad hacia un trasgo, mientras con el martillo aplasta a todo goblin a su paso hasta que uno con una lanza trata de emboscarlos, pero lo estaba esperando le agarra la lanza la parte, se la clava en un ojo y le da nalgazos para que aprenda quien manda hasta que de tantas nalgadas la saca por la cabeza todo su interior.
—I am watching you, motherfucking bitch.—Dijo Adam que se pone en posición de corredor. Se impulsa como un misil, conectando una poderosa lanza que los manda cayendo por un barranco mientras se golpean como perros hasta que caen hacia el nido.
Adam mira a su alrededor que está rodeado de goblin y algunas prisioneras.
—¡Llego el lechero! —Grito Adam que carga al trasgo como si fuera un muñeco de trapo. Los pobres goblins corren despavoridos ante el mastodonte imparable de Adam. Un shaman trata de conjurar un hechizo ofensivo y añadió. —¡Cuidao, sigan tu madre que te voy a masta!
Adam le lanza al trasgo con una fuerza monstruosa que lo termina haciendo papilla contra la pared. Sin dudarlo, le pega un poderoso rodillazo que lo noquea, para luego quitarlo de la pared, rematar al shaman con un poderoso puñetazo que le perfora la cabeza. Sin embargo, esto no ha terminado, aprovecha que el trasgo esta aturdido para aplicarle una fatality específicamente que la de Quan Chi que te arranque la pierna y te pegue hasta volarte la cabeza, pero en esta ocasión no lo hace. Con una patada lo voltea frente a él y salta hacia su pecho el cual aterriza encima atravesándole la caja torácica. Los goblins restantes van a vengarse del shaman pero no contaron con que él va a utilizar como arma. El los azota y aplasta sin misericordia.
Una vez terminada su masacre, va recorriendo toda la cueva matando goblins incluyendo a los goblins bebe, sin dejar a ninguno con vida además de recoleta sus orejas para tener evidencia de que limpio la cueva entrándolas en una especie de mochila que hizo con los calzones del trasgo y salvando a las prisioneras. Después de tanta masacre salen de la cueva sanos y salvos. Adam se va a un lago a limpiarse la sangre del cuerpo ya que estaba lleno de este, las prisioneras lo lavan en señal de gratitud. Él se pone su armadura y les dice que no le digan nada sobre su aspecto o las matara. Ellas aceptaron sin dudarlo ya que les debe su vida. Después de eso se van a las tierras del señor Harald. Uno de los soldados le informa al señor Harald. Este último no duda en verlo por lo que sale de su casa a verlo.
—Increíble, los aniquilo a todos. —Exclamo Harald que lo ve con la funda de orejas, también con las prisioneras y añadió. —Y estas hermosas damas son las prisioneras de esos bastardos.
—Si lo son, quisiera que me hago un favor, le parece bien. —Dijo Adam.
—Si diga lo que sea, estoy en deuda con usted. —Contesto Harald.
—Quiero que si no encuentran a sus familias se las quede para usted, o que la venda como esclavas a un señor feudal que sea bueno, se lo ruego por favor de todo corazón. —Respondió Adam, pero pensó. —Odio la esclavitud con toda mi alma y con todo mi ser. No puedo perder más tiempo y no encuentro una mejor solución para esto, así que me conformare con esta solución.
—Le parece bien si se queda unos días, aquí, para que repose del cruento combate. —Dijo Harald.
—Lamentablemente, soy un hombre maldito, solo me podría dar mis papeles, en serio lo siento de todo corazón, señor Harald, no soy digno de pisar su tierra sagrada. —Contesto Adam que se arrodilla ante él en señal de respeto y pensó. —Diablos, deberían darme un Oscar por esa tremenda frase.
—Nunca en mi vida he visto tanta humildad, está bien, conozco a un comerciante que se siempre pasa por mis tierras, él podría ayudarlo mientras usted estaba peleando contra los goblins durante dos días, Justamente ahora se acaba de ir. —Respondió Harald.
—Perfecto... —Contesto Adam, pero le ruge el estómago.
—Venga con nosotros para la comida, tenemos un gran festín para usted. —Respondió Harald.
—Está bien lo hare por esta vez. —Contesto Adam.
Adam acepta la petición, los sirvientes de Harald les prepara un banquete. Él come como si no hubiera un mañana hasta quedar satisfecho, él señor le da un medallón con el sello de la casa para que el comerciante lo ayude por lo que se despide de las prisioneras y se embarca en su búsqueda del comerciante.
Adam vuelve nuevamente a la casa en el árbol para buscar su mochila con sus armas y papel para luego emprende en su viaje comerciante trepando por los árboles como un ninja. Hasta lograr divisarlo, pero para que no crea que es ladrón, se desplaza a un kilómetro de distancia donde lo espera sentado en una roca. Él le hace señas mientras el carruaje se acerca a él.
—Buenos días, señor... —Dijo Adam.
—Matías Sellman. ¿Qué le trae por aquí joven guerrero? ¿Quiere algo de mí? —Contesto Matías.
—Si, yo sé, pero le quiero pedir un favor a usted. Se que lo que voy a pedir es algo que podría ser arriesgado o no, pero... —Respondió Adam.
—Mientras se legal le ayudare, aunque eso lleva un precio. —Contesto Matías.
—No se preocupe que, si tengo que ser su guardaespaldas para protegerlo, lo hare. —Respondió Adam.
—Usted se nota que es alguien razonable. Está bien lo ayudare ¿Que desea? —Contesto Matías mientras que él saca el medallón del Harald.
—En el nombre de Harald, necesito papeles de identificación nuevos. —Respondió Adam que le muestra el medallón y pensó. —Yo tengo mis papeles, pero no quiero que se den cuenta de lo que paso en Seras.
—¡Ah! Pero si era eso, está bien, te llevare a la ciudad de Andcry. Yo conozco a unas personas que te pueden ayudar con eso y además si desea como tiene porte de aventurero hay gremio del cual usted puede trabajar ahí. —Contesto Matías.
—Aventurero. —Dijo Adam, pero luego pensó en ese momento. —Tu típico gremio de aventureros...bueno yo quiero cualto, money, eft. Así que está bien, de algo hay vivir mientras uno encuentra al Hell como se llame. —Está bien iré con usted, ¿Qué es lo que desea que haga por usted?
—Que usted me compre. —Contesto Matías.
—En serio, solo eso. —Respondió Adam.
—Si solo eso. Así que ¿qué quiere de mí? —Contesto Matías.
—Tiene algo que me permita disparar rayos mágicos o algo así. He tenido problemas, a la hora de enfrentarme con magos malvados, shamanes, etc. —Respondió Adam.
—Tengo armas anti-magia...pero son muy caras. —Contesto Matías.
—No, ya tengo de esas, no tiene un artefacto mágico de esas. —Respondió Adam.
—Umm....le parece bien este medallón elemental puede disparar agua, fuego, aire, tierra, rayos, luz entre otros elementos. —Sugirió Matías.
—Está bien, ¿Cuánto cuesta? —Contesto Adam.
—Un millón de monedas de oro. —Respondió Matías.
—Su maldita madre va a comprar eso, pero es necesario. —Pensó Adam y añadió. —No tengo esa cantidad ya que necesito hospedarme en la ciudad, entre otras cosas.
—Lo entiendo, señor Adam, que le parece usted hace misiones en el gremio para que usted me pague en cuotas con intereses, claro está. —Contesto Matías.
—Me parece bien, que estamos esperando vámonos de aquí. —Exclamo Adam que se monta en el carruaje y emprenden en el camino hacia Andcry.
Una vez en la ciudad primer tienen que pasar por el portón gigante para que los guardias los dejen entrar. Matías le pasa un collar de aventurero de madera que es el rango más bajo. Los guardas le piden su identificación, él le entrega sus papeles, pero se los piden Adam, Matías dice que se lo robaron unos ladrones y que está aquí para ayudarlo. Los guardias le piden que se quite el casco, pero él se niega ya que fue maldecido por una bruja que lo volvió un Kulu. Los guardias y el comerciante se horrorizan por esto, pero a su vez tienen compasión de él. Uno de los guardias de la torre los acompaña hacia un edificio donde hacen el papeleo de para recuperar sus papeles, duran alrededor de una semana, mientras tanto Adam se la pasa yendo de restaurantes, durmiendo en una posada y en el edificio mientras le hacen sus nuevos papeles hasta que por fin se le otorga sus nuevos papeles.
Al día siguiente Adam se va temprano al gremio. Afortunadamente están abriendo el local en ese momento.
—Buenos días. —Dijo Adam.
—Joven guerrero, que hace aquí tan temprano. —contesto un hombre que tenía el uniforme del gremio.
—Soy nuevo aquí, pero un veterano en combate, quiero ser un aventurero. ¿Qué necesito para serlo? —Respondió Adam.
—Veterano… ¿Qué exactamente hacia? Por decreto real, toda persona que haga de aventurero sin ser del gremio es penalizado por la ley…pero no lo voy a asustar ¿Qué era usted? —pregunto el hombre uniformado.
Un aventurero entra y los interrumpe ya que escucho su conversación.
—James, deja de ser tan estricto con él, recuerda que los ataques monstruos y demonios son más frecuentes de lo normal al punto de que el ejército y nosotros no damos abasto por lo que el pueblo tiene que defenderse por sí mismo. —Dijo un aventurero que porta una capa con capucha de azul oscuro con una armadura ligera de color negro y de arma, una espada además de tener una honda con una funda de bolas de metal, una ballesta de mano y con flechas pequeñas en la parte trasera y una máscara muy similar al bufón de darkest dungeon.
—Solo le indico lo peligroso que haga misiones sin ser del gremio. —Respondió Matías que se dirige con el aventurero encapuchado y le susurra al oído. —Tengo que sonar imponente para que no se nos caiga el negocio, Morgan.
—Como sea... (Se dirige hacia Adam) no le hagas caso... ¿Cuál es tu nombre, joven caballero? —Dijo Morgan que le extiende la mano.
—Adam Anderson, un placer en conocerlo, señor... —Contesto Adam que también extiende su mano para sacudir las manos y pensó. —Joven no soy, tengo treinta, pero seguro debe ser por la experiencia que tiene. Aun así, le seguiré la corriente ya que me agrada.
—Morgan Stark, encantado de conocerte, Adam, te daré asistencia con tu inscripción. —Contesto Morgan mientras le ayuda con el proceso junto con Matías.
—No están difícil ser aventurero, acepta a cualquiera sin impórtale a nadie...espera exámenes, su puta madre va a ser exámenes. —Respondió Adam que llena su formulario.
Una vez que termina el formulario le entregan un collar con placas de madera indicando que es un aventurero de madera.
—Primero empezaras en madera, luego en piedra, cuarzo, marfil, metal, acero, diamante, rubí y el más escaso de todos esmeralda que tiene nuestro héroe Reynauld Dawnfall. —Explico Morgan.
—Pero puedo escoger la misión que yo quiera, no es porque soy una persona que le gusta ir solo, no soy muy sociable, Morgan. —Contesto Adam.
—Entiendo, puedes tomar la que desees, aunque no es lo recomendado ya que puede ser fatal y mortal para nosotros los aventureros. —Respondió Morgan.
—Está bien, ¡cuando empiezo? —Contesto Adam.
—Si quieres puedes comienza ahora. —Respondió Morgan que él le muestra la pizarra de misiones y toma una de ratas gigantes por lo que añadió. —Puedes comenzar con esta de ratas gigantes. —Respondió Morgan.
—Ratas gigantes, pero y quien este para decirme que es lo que tengo que hacer, yo mate el campeón del infierno y a un arcángel... aunque pensando lo bien mejor le sigo la corriente para que no me lleve quien me trajo. —Pensó Adam que acepta la encomienda y añadió. —— Está bien, oh, mira que bien la misión es aquí en la capital, pues que me den todas las misiones de ratas que de eso me encargo yo.
—Aquí tiene. —Dijo Matías que le entrega una cantidad excesiva de misiones de ratas y añadió. —Que tenga suerte.
—Si necesitas algo me lo dices, Adam, me tengo que ir a una misión de ogros que han asediado varios poblados. — Contesto Morgan que se retira de lugar, no sin antes tenía que decirle algo.
—Quieres que te muestre, los lugares para conseguir provisiones, darles mantenimiento a tus armas entre otras cosas. —Respondió Morgan para invitarlo a salir parar que conozca esos lugares.
—Está bien, porque no. —Contesto Adam,
Morgan y Adam se despiden del recepcionista para dar un paseo por la ciudad. Morgan le muestra los mejores lugares para con conseguir provisiones, darles mantenimiento a tus armas entre otras cosas. Una vez terminado con este paseo.
Ambos se despiden para ir a sus respectivas tareas, no sin antes que Adam busque el resto de las armas ya que solo fue con los cuchillos, una espada larga. Una vez en el lugar recoge su alabarda, deja la espada, toma una maza medieval, un escudo pequeño, una espada corta y su honda y va a probar su medallón mágico al bosque para probar su letalidad y es brutal.
La primera misión de las ratas es en la misma ciudad justo en el alcantarillado, esta no es la primera vez que pasa ya que en sus tiempos como esclavo ya se ha enfrentado a las ratas gigantes. Adam sabe cómo cazarlas primero se adentra en el alcantarillado se ponía un camino de comida para las hordas de ratas. Una vez que las hordas de ratas salen lo persiguen hasta que todas están bien juntas. Adam recita un hechizo de fuego mientras se va corriendo, una vez el hechizo listo le dispara un rayo de fuego que las oblitera para siempre.
—Este medallón es muy bueno. Ahora voy a abusar de él. —Dijo Adam con una risa malévola y en un acto de benevolencia se pone a recoger las cenizas de las ratas para tener su recompensa y se adentra más encontrando duendes y otros monstruos débiles que iba matando hasta dejarlo vacío y libre de monstruos.
Una vez terminado compra su recompensa que son cien monedas de oro. Después toma todas las misiones de ratas para ir a varias ciudades, poblados a erradicar a muchas ratas gano alrededor de 50,000 monedas de oro en dos meses. Básicamente, la mitad de lo que le debe, pero esta no contaba con los intereses que lo elevaron a 50,000 monedas de oro más haciendo un total de 150,000 por lo que Adam tenía que encontrar una misión que le deje más dinero.
Adam se encuentra deprimido se pone a beber una cerveza en el Gremio.
—Oh, señor Adam que le pasa que lo veo deprimido. —Pregunto Morgan.
—Le hice caso a su sugerencia e hice alrededor 500 misiones de matar ratas gigantes. Con eso pude ascender a cuarzo—Respondió Adam.
—Increíble, quinientas misiones de matar ratas gigantes, debo admitirlo eres bueno acatando orden, así que si quieres puedes venir conmigo a algunas misiones de recolección de reliquias. —Contesto Morgan.
—Oh, en serio. — Respondió Adam sorprendido
—Si te voy a enseñar todo lo que necesitar para la recolección tanto sea una misión centrara en este o no. — Contesto Morgan.
—Oh, que bueno, gracias, señor Morgan y ¿cuándo empezamos? —Pregunto Adam.
—Primero necesito que vallamos donde una anticuaria para saber qué es lo que debemos buscar. —Contesto Morgan.
—Perfecto y que estamos esperando, ¡vamos allá! —Respondió Adam.
Ellos se van hacia la anticuaria que indico Morgan.
—Buenos días, Morgan Stacy, veo que trajo a un compañero, ¿Cuál es su nombre? —Pregunto la anticuaria.
—Mi nombre es Adam Anderson. —Dijo Adam.
—Un placer en señor Anderson, mi nombre es Débora Montoya, bienvenidos a mi tienda de antigüedades. ¿Que desean? —Contesto Devora.
—Queremos saber las antigüedades que tenemos que buscar. —Respondió Morgana.
—Por ahora tienen que buscar las monedas de dajoc, estatuillas de la diosa y cualquier cosa que sea considerado raro y autentico. —Contesto Devora que les entrega dibujos de las monedas y estatuillas.
—Entiendo, gracias Devora, Adam vámonos tenemos cosas que hacer. —Exclamo Morgan.
—Entendido, Morgan. Ordene y mande. —Exclamo Adam que hace una pose de soldado.
—Tranquilo Adam, relájate, eres un aventurero, no un caballero imperial. Vámonos de aquí, para hacer la misión que tengo pendiente que es en la iglesia de los heraldos de Xenovia.—Dijo Morgan mientras ellos se retiran hacia la iglesia.
Ellos van a la iglesia, entran al recinto y una monja que esta enojada esperando.
—Xen Bridget, disculpe por la tardanza, es que estaba buscando a mi compañero para la incursión a la mazmorra. —Dijo Morgan.
—Usted me ha hecho esperar bastante. —Contesto Xen Bridget enojada.
—No se preocupe ya estoy disponible, es que se me junto mucho trabajo ya que trabajo para el gremio también.
—Disculpe por la intromisión, Señorita Xen Bridget, pero él es un gran hombre, ya estamos disponible, listo para adentrarnos a lo mazmorra, perdóneme si la ofendió dejándola esperando. —Suplico y rogo Adam para calmarla.
—¿Qué hace un aventurero clase cuarzo, con nosotros, señor Morgan? Acaso no ve lo serio que es este asunto. —pregunto la monja en ese momento llega un arquero caballero que también nos va a acompañar.
—Exacto, Xen Bridget, él es… Esa armadura es de escamas de dragon. —Exclamo el arquero caballero impresionado.
—¡Ah! Esto, si era de un dragon que mate ¿Por qué lo pregunta? —Dijo Adam como si nada.
—Ven, se los dije, este hombre podrá ser nuevo en esto, pero oculta un montón de batallas en su a ver, sin que nosotros nos percatemos. Por eso lo elegí. —Contesto Morgan que hizo sentir bien Adam.
—Gracias señor Morgan, lo aprecio mucho. —Dijo Adam agradecido.
—Y bien que estamos esperando vamos a comprar provisiones…—Dijo Morgan.
—Ya tenemos provisiones, vengan, yo los guio. —Contesto Xen Bridget mientras ellos la siguen hacia el patio de la iglesia hacia el convento de monjas, en la sala principal donde están en el piso las provisiones.
Morgan revisa las provisiones que estas consisten en comida para cuatro suficiente y para cualquier percance. Palas, antorchas, brebajes para enfermedades, vendajes, medicina entre otras cosas.
—Tenemos provisiones suficientes, vámonos hacia la mazmorra. —Contesto Morgan que parten en un carruaje proveído de la iglesia.
En el camino conversan para no aburrirse.
—¿Por qué no muestras tu cara, Adam, tú también estas maldito? —Pregunto Xen Bridget.
—Si, solo que la diferencia es que ve volvieron un Kulu. —Contesto Adam.
—Un Kulu no me quiero imaginar lo repulsivo que eres. —Respondió Xen Bridget.
—Tampoco no tienes que ser tan dura con ello, sé que los Kulus tienen su pasado, pero son seres humanos al final de cuentas, con una piel diferente a la nuestra y Adam me ha demostrado que se puede razonar con gente así. —Contesto Morgan que le levanta un poco el ánimo, con esa frase.
—Pero cuidando tu espalda, no. —Respondió el arquero caballero.
—Uno cuida su espalda, si uno no tiene confianza, pero creo que con Adam no sentiría miedo realmente. —Contesto Morgan.
—Les parece bien si trabajamos en nuestra estrategia en la mazmorra. —Respondió Adam.
—Tienes razón, Adam. Vamos a planificar nuestra estrategia. —Contesto Morgan que dar órdenes antes llegar a la mazmorra.
El plan es el siguiente Adam estará al frente encargándose de los pequeños y medianos que no comprendan una dificultad mayor, tu Disnauld te encargaras de la parte trasera y yo me encargare de la Xen Bridget.
—No gracias, señor Morgan, pero se me cuidar sola, tengo el poder que me ofreció, la diosa Xenovia con eso me vasta. —dijo Xen Bridget.
—El exceso de confianza es un asesino silencioso. —Respondió Adam que provoca que ella se asuste por un momento.
—Pero la Diosa Xenovia la protege. —Contesto Xen Bridget.
—Y si su muerte es parte del plan de la Diosa que usted va a hacer. —Respondió Adam.
—Bueno...eh... —Se altero Xen Bridget.
—Y si la voluntad de Xen Bridget, es que el señor Morgan lo acompañe, no lo cree. —Contesto Adam.
—Está bien, dejare que Morgan me escolte, pero como usted sabe todo eso. —Respondió Xen Bridget.
— Es un secreto, pero tenía sueños con la diosa, no sabía quién era ella. Usted sabe hasta los demonios tiene su forma de como engañar a las personas. —Contesto Adam.
—Comprendo, señor Adam. Aun así, era la misma descripción de la Xenovia que conocemos. — Respondió Xen Bridget.
—¡Ya basta, señorita Bridget! Lo importante es que Adam está aquí con nosotros. —Exclamo Morgan.
—Señor Morgan tranquilícense solo le están haciendo preguntas. —Defendió Disnauld a Xen Bridget.
—Si, claro y cuando lleguen al grano que van a hacer con él. —Respondió Morgan.
—bueno…eh…—Contesto Disnauld.
—Parece que no sabes o acaso te haces el que no sabe. —Respondió Disnauld.
—No me digas que tú todavía nos tienes rencor por eso. —Contesto Xen Bridget.
—¡ya basta! Se que nosotros tenemos nuestro pasado, pero no debemos de pelear entre nosotros sino contra los monstruos de la mazmorra. —Respondió Adam que mira por la ventana a la mazmorra.
Después de media hora logran llegar al lugar. Una vez que llegaron, el exterior de mazmorra emitía un aura maligna aterradora. Esta aura hizo que a la sacerdotisa casi la hace vomitar al igual que el arquero.
—No se pongan así, es solo una mazmorra. —Contesto Adam como si nada.
—Esa es la mazmorra de Omen, una de las mazmorras más peligrosas de la región. —Respondió Morgan.
—Entiendo, aun así, no me intimida entonces, Xen Bridget hay que purificar esta mazmorra. —Contesto Adam.
—Exacto, tenemos que cambia los altares de bendición que evitan que los monstruos salgan del lugar. —Contesto Xen Bridget.
—Prefiero mejor destruirá, pero me imagino que eso sería peor. —Respondió Adam.
—Lo que pase es que, si no purificamos las mazmorras, estas se convertirán en una mazmorra viviente que destruirá todo a su paso. —Contesto Morgan y añadió. —Para eso necesitamos hacerlo.
—Está bien, señor Morgan, si usted lo dice. —Respondió Adam y añadió. —Que estamos esperando vámonos.
—Exacto, no hay tiempo que perder. —Contesto Morgan.
Ellos entran a la Mazmorra. En su camino, se encuentran con varios monstruos, pero Adam se los despacha hasta llegar al primer altar, así como recoger algunas antigüedades. Xen Bridget Cambia la estatua del altar para poner una nueva, hacen el rito de bendición para así dar como concluido la restauración del primer altar.
—Listo quedan tres. —Contesto Xen Bridget.
—Y esto cada cuanto hay que hacerlo. — Respondió Adam.
—Cada año, por eso levo aventureros de clase muy alta, pero últimamente con las oleadas de monstruos que han estado apareciendo, el precio por hacer esto es muy alto. —Explico Xen Bridget.
—Entiendo, vamos mis compañeros que, esto apenas está comenzando. —Exclamo Adam y pensó. —Yo estoy, motherfucking roto, ¡Roto, coño!
Ellos continúan el viaje en la mazmorra donde ellos se pierden un poco.
—Que tú crees que piensa, es por aquí o por acá. —Contesto Adam que está un poco cansado.
—Que extraño, siento como si los caminos se movieran por si solos. —Respondió Morgan que verifica el mapa minuciosamente.
—Que les parece si dejamos marcas para poder saber dónde hay que ir. Moriremos de hambre si seguimos así. —Propuso Disnauld.
—Me parece bien, Adam deja unos números indicando por las veces que hemos pasado para que podamos encontrar el camino hacia los altares. —Contesto Morgan.
—Está bien, mi lord. —Respondió Adam que hace lo que Morgan le ordeno.
Gracias a esta técnica, ellos pueden llegar a segundo y tercer Altar.
—Listo solo falta uno, y ese es el más peligroso ya que está en el centro de la mazmorra —Dijo Xen Bridget.
—y Que estamos esperando vamos hacia allá. —Contesto Adam ansioso por ello.
—Cálmate ahí, Adam, es peligroso hay muchos monstruos por ahí. No podrás con todo al mismo tiempo. —Respondió Morgan. —
—Exacto, Kulu, no eres invencible. —Contesto Disnauld.
—Hagamos una apuesta, si logramos salir de aquí con vida me darán la mitad del botín si acabo yo solo a esos monstruos, sino yo les daré mi recompensa. —Respondió Adam.
—Está bien, si tú lo dices. —Contesto Disnauld.
—No participes en eso, Disnauld que es pecado. —Respondió Xen Bridget.
—Lo siento chicos, pero ustedes saben. Aun así, te cubriré la espalda en que caso de que estires la pata. —Contesto Disnauld.
—Bueno, Morgan, quedamos ente tú y yo. —Contesto Adam.
—Está bien, vamos a hacerlo, pero no te arrepientas. —Dijo Morgan mientras se aprietan las manos cerrando el trato.
Después de esto, siguen recorriendo la mazmorra para llegar al centro, sin embargo, hay hordas de monstruos en su camino más numerosas de lo habitual. Aun así, Adam se los despachaban como si nada, hasta que llegan al centro donde hay un ejército de monstruos que están preparados para subir a la superficie.
—Como vamos a llegar allá abajo, es un suicidio. —Contesto Disnauld.
—Tenemos que elaborar un plan... —Respondió Morgan.
—¡Leeroy Jenkins! —Grito Adam que toma carrera para tirar se dé un quinto piso para aterrizar encima de un ogro matándolo en el progreso. Él aprovecha el caos para apuñalear a varios monstruos en el vientre, él le quita las armas para así poder hacer el tornado sangriento para aniquilar a todos los monstruos que se coloca en su camino. Ellos aprovechan el desmadre para bajar hacia el corazón de la mazmorra, pero esta crea versiones de ellos mismos, pero con poderes, pero ellos los combate. El doble de Adam se dirige donde el pero cuando se abalanzan hacia él. Adam lo corta en X, para luego seguir con su tornado sangriento, él se percata de que necesitan ayuda por lo que en un parpadeo aniquila a todos los dobles, la mazmorra se siente amenazada así que invoca aun golem gigante para que los destruya, pero encuentra unos picos de aventureros caídos para usarlos en su favor.
Una vez que consigue los picos, se escurre entre las piernas, le destruye con las palas los ligamentos de los pies, luego los de las rodillas, escala por todo su cuerpo debilitando le destruye los brazos hasta llegar hacia la cabeza le inserta los picos en los ojos y le parte la cabeza en dos y con un mazo de guerra destruye el corazón. Adam lanza un grito de guerra para que los monstruos que sobrevivieron a la masacre se salven. Uno de los shamanes, estaba vivo y le iba a disparar un rayo mágico, pero Morgan lo remata.
—Te falto ese. —Contesto Morgan.
—Ya lo sabía, solo que te lo deje aun así la armadura aguantaría ese ataque. —Respondió Adam de altanero.
—Listo, ya está altar preparado. Volvamos a casa. —Contesto Xen Bridget.
Después de un largo camino salen de la mazmorra, se van caminado, pero encuentran a un carruaje ambulante y le pagan para que los lleve a la ciudad de Andcry. Una vez que llegaron al templo de la diosa Xenovia. Ella les paga 100 mil monedas de oro a cada uno.
—Toma 50 mil monedas de oro. —Respondió Morgan.
—Pero no tendrás gastos pendientes...no. —Contesto Adam. —
—Yo no le debo a nadie, gracias a la diosa, así que ve y se libre de tu deuda. —Respondió Morgan que se retira de ahí.
Adam se dirige hacia donde reside el comerciante para que pagarle. Una vez dentro, él le paga lo que él debe.
—Eres buena paga, muchacho, no quieres algo más. —Contesto el Matías.
—Quiero matar dragones así que me faltara un buen equipo. —Respondió Adam.
—Está bien, te facilitare un equipo, mañana en la mañana te lo facilitare. —Exclamo el Matías.
—Perfecto, nos vemos mañana. —Se despido Adam que se dirige a su cuarto alquilado. Él se queda pensando y añadió. —No tengo dinero para comer hoy. Que maldita mierda.
Adam se va al gremio para ir a varias misiones cercanas para ganar algo de dinero hasta que anocheció, en esas misiones se ganó unas 10 mil monedas ya que eran cercanas y rápidas. Él aprovecha cena en un restaurante y luego se va a dormir a su cuarto.
A la mañana siguiente, el Matías fue temprano, le provee unas lanzas, armas y una nueva armadura de escamas de dragon.
—¿Cuánto cuesta todo esto? —Exclamo Adam.
—Te lo dejare en un millón de monedas y si me traes escamas que ellos mudan, te lo rebajare en 750,000 de oro, más una comisión por la cantidad de escamas que traiga. —Contesto el Matías.
—Bueno si tú lo dices, Matías, trabajare duro para ser libre de deudas. —Respondió Adam.
Adam toma las misiones de Dragones ya que con las del altar pudo subir a clase metal, por lo que ya puede hacer esas misiones. Pero antes de hacer estas misiones, se va a hacer otras que quede cerca de las misiones de dragon. Él se pone a hacer esas misiones para conseguir unas 20 mil monedas con eso compra un carruaje para poder irse a su misión de asesino de dragones.
Él hace estas misiones en silencio ya que los dragones duermen mucho por lo que procede a matarlos en silencio, de paso recoge varias fundas llenas de antigüedades y diamantes para no dejárselo todo al reino. En total aniquilo a cinco nidos y ganando lo suficiente para pagarle la deuda al comerciante y tener un apartamento propio para dormir allí. También decide hacerse su propia comida, en vez de comer fuera, compra muebles ya por fin Adam estaba en paz.
Pese a que Adam está libre de toda deuda, él decidió ir a un burdel, para que le trate sus heridas psicológicas y también a tener relaciones sexuales. Se va con una prostituta llamada Beatriz, ella es humana voluptuosa y athletica muy buena con este tipo de cosas y cabello corto y maquillada de negro como si fuera una chica gótica en estos tiempos, ellos dos se llevan también que incluso cuando no está trabajando tanto él como ella se ponen a hablar mientras camina por la ciudad.
—Y cómo te sientes, Adam. Ya se te quito tus traumas, con todas esas visitas. —Contesto Beatriz.
—Si, un poco, gracias por ocultar mi secreto y de ayudarme en estos momentos difíciles. En serio te dé una. —Respondió Adam.
—Y ahora qué vas a hacer, con tu vida, no me digas que vas a seguir con tu manía de querer matar al rey demonio. —Contesto Beatriz.
—Tengo que hacerlo, Beatriz, es mi destino. —Respondió Adam.
—Ese es el destino del héroe. —Contesto Beatriz.
—Entonces yo... —Exclamo Adam.
—Está bien, ya entendí, pero al menos, no hagas un espectáculo de esto. —Dijo Beatriz que lo detiene y añadió. —Al menos no tienes algo que hayas querido hacer en la vida.
—yo. —Contesto Adam.
—Si, ya eres libre puedes hacer lo que sea que te propongas. —Respondió Beatriz.
—Lo que me proponga. —Dijo Adam y pensó. —Bueno yo se cantar y dibujar podría ganar dinero con eso mientras no haya misiones de dragones o un monstruo en específico.
—Podría ser un trovador no y un pintor. —Contesto Adam.
—Perfecto, así se habla que si quieres podemos comprar los materiales para tu debut. —Respondió Beatriz que lo lleva a comprar los materiales que necesita.
Después de una tarde de compras, Adam la acompaña hasta su casa y ella le roba un beso en la boca para luego entrar a su casa. Él se devuelve a su casa con todas las cosas que compro. Se pone a tocar la guitarra recordando cuando Eldar le enseño a tocar guitarra y la tocaba para que por un momento después de un largo día de trabajo sintieran el consuelo de la música.
Adam practico toda la noche hasta lograr dominarla a la perfección. A la mañana siguiente Adam se pone su armadura se lleva sus cuchillos, dos espadas cortas, y una larga también su guitarra, se va a investigar con los caballeros imperiales para poder conseguir el permiso. Ellos le indican que vaya a un edificio dándole las instrucciones de cómo llegar para que le otorgue el permiso ya que durante su tiempo de esclavitud había trovadores que no les daban el permiso y era normal que eran llevados a la cárcel.
Una vez que sigue las indicaciones de los caballeros, un recepcionista lo atiende, Adam le entrega sus papeles y le indica que tocar en la plaza y vender sus dibujos. Cuando el recepcionista verifica todo lo lleva con un hombre que es el encargado de dar el permiso, ellos van a su oficina. El también verifica sus papeles, le dice que son 100 monedas de oro, los cuales paga sin dudarlo, él gana más que eso en mazmorras. Así que se va de una vez a sentarse en la plaza y se pone a cantar una variación de las bachatas típicas de la república dominicana (Romeo Santos, Juan Luis Guerra, Héctor Acosta "El Torito", Luis Vargas, entre otros)
Esto llamo mucho la atención de buena marea ya que, a las personas, le gustó mucho lo que cantaba ellos le tiraban monedas para que siga cantando hasta la bolsa no dio para más y dio por terminado el concierto. Él hizo esto cada mañana que estuviese en la ciudad ganándose unos géneros mil monedas de oro. Para luego volver a su trabajo como aventurero, las personas lo llaman el aventurero cantante también aprovecho y vendió sus pinturas a precios elevados, pero como era famoso se las compraban como si nada.
Después de esto, Adam volvió al burdel para ver a Beatriz, afortunadamente está disponible. Ella se abalanzo hacia el muy contenta por lo que había hecho como trovador.
—Felicidades Adam, eres famoso en esta ciudad. —Contesto Beatriz y añadió. —ven pasa, hay muchas cosas que tenemos que hablar.
—Si, hay muchas cosas que hablar. Tengo que hablar seriamente contigo, Beatriz. —Respondió Adam en un tono serio.
—Que pasa Adam, hay algo malo. —Dijo Beatriz.
—Tengo que irme, ya tengo el dinero suficiente dinero para irme hacia mi nueva aventura en busca del Hell Dealer. —Contesto Adam.
—Está bien, no llorare. —Respondió Beatriz que quiere evitar llorar.
—Puedes llorar y golpearme si quieres, lo aceptare. —Contesto Adam por lo que ella llora a cantaros y lo golpea varias veces en el pecho.
Después de un tiempo, logra salir del Burdel para embarcarse para irse en su carruaje y comenzar su siguiente aventura.
A continuación, varias personas procedentes de la iglesia de está investigando sobre lo acontecido en seras.
—Que habrá pasado aquí, dice uno de los investigadores. —Dijo el investigador No.1
—No lo sé, pero, sea lo que sea hay que encontrarlo y destruirlo cuanto antes, — Contesto el investigador No.2
—Tienes razón. —Respondió el investigador No.1.