*Punto de vista de Lila*
No había forma de evitar lo nervioso que estaba. Yo era un niño ansioso pero nada ingobernable. Esa ansiedad también era buena para el periodismo, cuestionar cosas, seguir líneas de pensamiento que a otros quizás no se les ocurren, cosas así.
No cambió lo nervioso que estaba por conocer a la familia.
A Rafe no le quedaba mucha familia. Sus padres ya no estaban y la mayoría de sus primos eran parientes más lejanos o parte de la manada Bolstrode, lo que dejó las cosas incómodas. Eso significaba que su única familia cercana era Luna.
Estaba sentada frente a Luna en un comedor después de que me escaparon de la mansión y me sacaron para el "día de las chicas". Sólo que Mia no estaba presente y yo era la única otra chica.
"Entonces... ¿me han secuestrado?" Pregunté, en broma.