Punto de vista de Vika
Pensé que Asher estaba enojado conmigo. Levanté los ojos y miré su espalda. Tenía los hombros y la columna rígidos.
De vez en cuando, su mano apretaba incómodamente mi muñeca.
¿Estaba enojado conmigo?
'¡No, Vika, eso es estúpido! ¿Por qué estaría enojado contigo?
No pude consolarme. Asher había salido en mi defensa frente a la princesa. Mi corazón se aceleró ante el pensamiento, pero no sabía por qué no me miraba ni me hablaba.
Asher me llevó a un claro apartado en el bosque. Lo vi mirar alrededor rápidamente antes de mirarme.
"¿Estás herido?" preguntó bruscamente.
“Nada grave”, le dije. Él me miró fijamente.
Asher dio un paso hacia mí y me agarró del brazo. Me subió las mangas y me inspeccionó en busca de heridas.
"Dije que estaba bien", argumenté, tratando de alejarme. Asher gruñó.
Me miró con una mirada endurecida y enojada. Dejé de luchar contra él.
Sí, definitivamente estaba enojado.
Me subió la manga del otro brazo y siguió examinándome.
