*** Punto de vista de Ariana ***
Observé su espalda mientras caminaba por el campo. Tenía una espalda recta que parecía muy fuerte. Coincidía con su naturaleza decidida. Lo admiré todo el tiempo que pude y se desvaneció en la oscuridad de la noche. Vi que la luna no estaba presente en el cielo. Pero pude ver los planetas Venus y Júpiter.
Dejé escapar un profundo suspiro cuando vi su luz destellar en el cielo. Recordé las historias que me contaba mi madre cuando era niña. Que la diosa Venus podría someter incluso a Marte, el dios de la guerra. Los poderes del amor dominaron la guerra. Y Júpiter encarna la sujeción del caos al orden. Me encantaron sus historias y sus historias me dieron mucha esperanza.
Quizás tengamos alguna esperanza de lograr nuestro objetivo de paz.