Punto de vista de Seraphina
No sé cuánto tiempo estuve sentada en aquel escenario, con el vestido blanco manchado de sangre, sosteniendo el cuerpo de Kit. Me palpitaba la cabeza de tanto sollozar. No oía nada más que los latidos de mi corazón. Mi respiración era ruidosa en mis oídos.
No lo sentí cuando Xander subió al escenario detrás de mí y me puso una mano en el hombro. Ni un respingo. Ninguna reacción.
Mi garganta estaba ahogada por el dolor. Un dolor insuperable al que no sabía si sobreviviría. Podía sentir cómo el corazón se me partía en el pecho por la mitad.
William había hecho trampa. Era obvio para mí y obvio para los ancianos que estaban en pánico y susurrando entre sí. Parecía que sin un Alfa, el vínculo mental también se había roto. No había Alfa para anclarlo.
